La Fondita de Jesús celebró la Víspera del Día de Reyes con las personas sin hogar y adultos mayores, quienes disfrutaron de música, comida y obsequios entregados por voluntarios vestidos de los tres Reyes Magos de Oriente.

“Culminamos con la tradicional Fiesta de Reyes las actividades para nuestros adultos mayores y personas sin hogar que hemos realizado para acompañarlos durante toda la Navidad. Aquí los acogemos, los queremos como su familia y les reiteramos nuestro compromiso con cada uno de ellos. Hoy recordamos que cada persona tiene un niño interior y en estos días los Reyes Magos vienen a abrazarlos, sin importar su edad”, manifestó Josué Maysonet, director ejecutivo de La Fondita de Jesús.

En el evento, alrededor de 200 personas sin hogar y adultos mayores disfrutaron de un desayuno, un servicio espiritual, actividades y regalos, así como un almuerzo amenizado con música navideña. Los regalos incluían artículos de higiene, carteras impermeables para guardar sus documentos y mantas para protegerse de las noches frias de esta época.

Maysonet, quien fue uno de los vestidos de Rey Mago, aprovechó para reflexionar con esperanza sobre los desafíos que enfrenta Puerto Rico al llegar el 2024 que tienen urgente necesidad de intervención, como un sistema de salud para todos y vivienda asequible y equitativa.

“La situación de la vivienda en Puerto Rico es motivo de profunda preocupación. Las estadísticas indican que existe una escasez significativa de viviendas asequibles, con una población considerable enfrentándose a la falta de hogar. La magnitud de este problema requiere soluciones integrales para garantizar que cada ciudadano tenga un techo digno sobre sus cabezas y la posibilidad de construir un futuro estable”, planteó Maysonet sobre este problema social que encara la población que atiende La Fondita de Jesús.

En el marco de la festividad, Maysonet planteó cómo todos los sectores, desde el gobierno, el sector privado y los ciudadanos como individuos “estamos llamados a ser Reyes Magos que con su trabajo y esfuerzo puedan traer soluciones y esperanza a los más vulnerables y a Puerto Rico”.

Entre los voluntarios en la actividad de Reyes de La Fondita estuvieron el niño Steven Ramos Kuilan, su hermano Adalberto y su mamá Coral Kuilan, quienes sirvieron los almuerzos que preparó el equipo de la organización. El niño Steven, de 11 años, se ha destacado porque en esta Navidad, en lugar de pedir regalos, solicitó poder llevarle comida a personas sin hogar. Así lo hizo en Navidad y lo repetirá el Día de Reyes. Hoy estuvo en La Fondita sirviendo almuerzos como voluntario.

Por 38 años, la Fondita de Jesús ha impactado positivamente las vidas de miles de personas sin hogar, personas marginadas y residentes de comunidades empobrecidas. La organización sin fines de lucro brinda servicios esenciales (alimentos, duchas, ropa, recreación, transporte, etc.), servicios psicosociales y de salud, viviendas asequibles, adecuadas y seguras, organización comunitaria, desarrollo de capacidades y ayuda en casos de desastre, y empodera a los ciudadanos, promoviendo al mismo tiempo la equidad y la justicia social.