Orgulloso con la estrella de mar en cerámica a la que dio forma por las pasadas semanas, José Ortiz contó hoy cómo fue que descubrió que tenía talento para la escultura. Ya sabía que podía escribir canciones y poemas, y que era un buen dibujante, pero los talleres que tomó este verano en la Liga de Arte de San Juan le permitieron encontrar una nueva pasión artística.

José, de 20 años, estuvo bajo la custodia del Departamento de la Familia desde los dos años y se encuentra en transición hacia la vida independiente con el apoyo de la Administración de Familias y Niños (ADFAN). Es uno de los 50 jóvenes en circunstancias similares que durante julio tomaron clases de pintura, cerámica y dibujo como parte de los servicios que la agencia coordina para exponerlos a experiencias nuevas.

“Aprendí a dibujar yo solo para expresar lo que sentía, pero al tocar la cerámica me di cuenta que sobresalía. No sabía. Gracias a la actividad descubrí que era bueno en eso”, contó el joven que reside en Carolina y estudia para convertirse en barbero mientras se desarrolla en el dibujo con la intención de ser tatuador más adelante.

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Otra de sus obras es un dibujo acompañado de un poema que lee “La luna llora al ver que el mundo no mejora. La naturaleza muere cada vez que la humanidad la hiere, el mundo se desinfla, se va lo bueno y de contaminantes vuelve y se infla”.

“Escribo de lo que siento en el momento. Todos me han dicho que puedo hacer poemas y libros”, añadió José, quien fue también uno de los siete que recibió el reconocimiento de la directora ejecutiva de la Liga de Arte, Ivonne Prats, y que podrían ser becados para continuar estudios en la institución.

La secretaria de la Familia, Idalia Colón, y la directora de la Administración de Familias y Niños (Adfan), Vanessa Pintado, celebraron hoy a José y a los demás jóvenes en la culminación del programa. Sus obras estaban hoy expuestas en los pasillos del edificio en el Viejo San Juan y los participantes las mostraban con orgullo a trabajadores sociales y manejadores de casos que los acompañaban.

“La historia de José es como la de muchos otros jóvenes que al igual que él están en transición a la vida independiente y tienen experiencias de vida de las que todos tenemos que aprender. Nos toca a nosotros, en estas posiciones de gobierno, esas historias de vida transformarlas de forma positiva. Es lo que hemos querido crear en estos espacios de arte”, explicó Pintado sobre la actividad que se realiza cada verano en un centro diferente con la intención de exponer a los jóvenes a la creación artística y cultural.

“El vínculo con el arte es algo mágico”, dijo Colón durante un recorrido por la exposición de trabajos. “No hay duda de que a través del arte tú aprendes disciplina, te concentras, trabajas en equipo y posiblemente descubres otro potencial que si no fuera por esta experiencia no saldría”, añadió la secretaria.

Los talleres estuvieron a cargo de los profesores y artistas Hiram Rosado, ceramista; Anaida Hernández, pintora y muralista, y Efraín “Franchi” Morales, caricaturista.