Joan Marie Meléndez Ortiz: Una boricua que llegará a las estrellas
La ingeniera puertorriqueña fue seleccionada, junto a otras cuatro personas, para realizar un viaje espacial.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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Joan Marie Meléndez Ortiz es una barranquiteña que desde niña miraba a las estrellas y soñaba con ir al espacio. Muy pronto cumplirá ese sueño.
Ingeniera de integración aeroespacial de la National Aeronautics and Space Administration (NASA, por sus siglas en inglés) desde el 2020, Meléndez Ortiz fue escogida entre 2,000 solicitantes para formar parte de un selecto grupo de cinco personas que próximamente viajarán al espacio.
“Era una competencia de la compañía aeroespacial Uplist Aerospace. Había casi 2,000 personas que aplicaron, de 2,000 solo seleccionaron cinco finalistas. Ellos querían escoger solo una persona, pero la compañía dijo ‘nos encantaron estos cinco’, por lo que decidieron cambiar de uno a cinco finalistas”, contó Meléndez Ortiz en entrevista telefónica con Primera Hora.
El grupo que tomará las clases para ser astronautas comerciales se llama Space Plus5 y está compuesto por tres hombres y dos mujeres. Una vez pasen el entrenamiento, que comenzará en septiembre u octubre, podrán realizar el viaje espacial con la empresa estadounidense de transporte Blue Origin.
La puertorriqueña recordó que, como requisitos para ser evaluada, tuvo que preparar un ensayo y un vídeo. Cree que destacar su amor por las ciencias, pero, sobre todo, resaltar su crianza y su pasado llenos de esfuerzo y dedicación, resultaron en que llamara la atención de los reclutadores.
“En el vídeo hablé de mi vida profesional; yo soy ingeniera para la NASA, científica, trabajé con aviones, pero también hablé de mi vida personal… hablar de cómo una latina, una mujer latina en STEM (el acrónimo de los términos en inglés Science, Technology, Engineering and Mathematics) y hablar cómo llegué a donde llegué”.
Tanto en el escrito como en el material audiovisual, Mélendez Ortiz también destacó su labor humanitaria a través de organizaciones en Orlando, Florida, (donde reside) que se dedican a ayudar a personas de bajos recursos, por ejemplo, con la entrega de artículos escolares. Esa ayuda, dijo, ha llegado a Puerto Rico y países de Latinoamérica.
“Nací en Panamá, porque mi papá estaba en el Army, pero al mes –de nacida- regresamos para Barranquitas. Me crié ahí hasta los 12 años, cuando nos fuimos a Orlando”.
De Barrancas a las estrellas
La graduada de ingeniería química y biomolecular de la Universidad de Maryland, recuerda que, desde chiquita, le encantaba ver las estrellas desde el patio de su casa en el barrio Barrancas de Barranquitas y le comentaba a su mamá que cuando adulta quería ayudar a la gente.
Mencionó que tuvo en mente ser doctora, pero al no poder tolerar el contacto con la sangre, cambió por la ingeniería. Y no se arrepiente.
Su exhortación a todas las personas, en especial a las niñas, que aman todo lo relacionado a las ciencias espaciales, es a que “sigan con sus sueños”.
“Yo no cogí el trabajo en la NASA hasta que apliqué 14 veces. Las 13 veces que apliqué me dijeron que no”, recordó.
“Nunca pares lo que tú quieres hacer, porque yo podría haber parado en el tercero, quinto, séptimo intento, pero seguía porque yo sabía lo que yo quería hacer y yo quería trabajar para la NASA. Mucha gente cuando alguien te dice que no, tú lo coges personal y dices que ellos no te gustan, pero yo siempre digo que ese no, no es un no para ti, es un no para este momento y en este tiempo. Sigue lo que tienes que hacer porque un día de estos vas a llegar a las estrellas”.