¿Qué vamos hacer? En medio del encierro y la incertidumbre que permeaba en el sector eclesiástico para marzo del 2020, esta era una de las tantas preguntas que los líderes cristianos se hicieron, pero contrario a lo que dictaba la batalla mental, la buena nueva no podía callarse.

Este escenario sirvió para extender el alcance de la Iglesia Metodista de Puerto Rico, afirmó el obispo Héctor F. Ortiz Vidal, quien lleva seis años en el episcopado y 48 como pastor.

“Ese ‘lockdown’ ocurrido el 15 de marzo del 2020 obviamente tomó a todo el mundo de sorpresa y algunas de nuestras iglesias ya usaban los medios digitales, pero la mayoría no los usaba y, por lo tanto, tuvimos que durante las semanas posteriores iniciar un increíble trabajo de preparación y adiestramiento de cómo utilizar los medios digitales para maximizar la comunicación de la iglesia con el pueblo. Yo te diría que esos meses de marzo, abril y mayo fueron intensos, sobre todo esa Semana Santa que era la primera fuera de nuestros templos”, describió el obispo.

Al igual que otras denominaciones cristianas, la Iglesia Metodista recurrió a las transmisiones en vivo por Facebook como herramienta inicial y apoyó invertir en nuevos dispositivos. Ahora también recopilan estadísticas para contabilizar ese alcance.

“Hemos incluido una sección de estadísticas digitales que dice número de cultos transmitidos por internet en el año, promedio de visitas semanales, de los ‘views’, promedio de ‘shares’, promedio de ‘likes’, promedio de comentarios y número de personas conectadas digitalmente durante el año. Y es increíble cómo es que hemos multiplicado nuestro alcance, o sea que la pandemia, en lugar de limitarnos, lo que hizo fue que expandió nuestro radio de alcance”, explicó.

Ilustró que en un año una congregación metodista transmitió 52 cultos, con un promedio de reproducciones de 100 a la semana. Algunas iglesias transmiten por Facebook y por radio simultáneamente, combinando lo tradicional con lo moderno. “Hay iglesias que han puesto sistemas de cámaras que se controlan digitalmente para mejorar la calidad de la imagen que se transmite en el templo”.

Incluso, la pandemia fue una oportunidad para compartir con otros cuerpos eclesiásticos, y parte de ello fue un taller sobre tecnología que el hermano Jesús Rodríguez, de la Iglesia Cristiana Discípulos de Cristo, impartió a la Iglesia Metodista. En específico, aprendieron a cómo perfeccionar las transmisiones de los cultos utilizando Facebook Live, recordó el reverendo.

Para el líder de los metodistas, y quien en verano próximo se jubilará, “lo digital llegó para quedarse”. “Hemos tenido gente que después de varios domingos conectándose digitalmente, en algún momento ha hecho contacto con el pastor o la pastora y en algún momento también ha visitado el templo. Tenemos gente que vive fuera de Puerto Rico, se conecta y sostiene financieramente a la iglesia mandando su ofrenda. La frontera de nuestras iglesias traspasó Puerto Rico, sobre todo mucha gente en la diáspora se conecta”.

Tenemos que promover la paz con justicia, la oración, la solidaridad y el cuidado, que esa es la palabra del momento, cuidar. Creo que la Semana Santa es un buen momento para reafirmar eso.

-Héctor F. Ortiz Vidal, obispo de la Iglesia Metodista de Puerto Rico

Empero, enfatizó que esta modalidad no puede aguantarse en la pantalla. “Tenemos que perfeccionarlo para que no se circunscriba a una mera transmisión, sino que hagamos contacto con esos que se conectan con nosotros”.

¿Cómo sería ese contacto?

“Decirle que estamos a la disposición, que estamos dispuestos a visitar al enfermo, de acompañarle en sus crisis, estar abiertos a brindar ayuda cuando lo necesiten, que ellos sepan que la iglesia tiene múltiples ministerios de cuidado y si algo necesita Puerto Rico es gente que cuide, el verbo cuidar es el verbo del momento y los medios digitales pueden ser un primer peldaño para establecer un vínculo de cuidado. No es meramente una cuestión proselitista, tiene que ver con alcanzar a seres humanos para lograr establecer un vínculo de cuidado”, reiteró ante la pregunta.

Parte de ese cuidado abarca cubrir al más necesitado. Durante la pandemia, la Iglesia Metodista de Puerto Rico ha repartido unas 140,000 compras de alimentos, unos 120,000 cupones de alimentos y “miles de dólares en ropa”, precisó el obispo. “La gente no se da cuenta de la pobreza que hay en este país y nosotros en esta pandemia nos hemos tirado a la calle a acompañar al pueblo, sobre todo a ese pueblo que es invisible, a darle los recursos que necesitan para sobrevivir”.

“Tenemos que promover la paz con justicia, la oración, la solidaridad y el cuidado, que esa es la palabra del momento, cuidar. Creo que la Semana Santa es un buen momento para reafirmar eso”, sostuvo.

La Iglesia Metodista de Puerto Rico actualmente tiene 11,000 miembros y 100 templos, incluyendo en Culebra, Vieques y Saint Croix. El movimiento metodista lleva 122 años en la Isla. La reverenda Lizzette Gabriel Montalvo tendrá la encomienda de dirigir esta denominación a partir de julio próximo.