A pesar de que los hospitales del País han podido abastecer de diésel sus generadores mediante contratos con suplidores privados, la alta demanda dificulta tanto la frecuencia como la cantidad que han estado recibiendo. 

Ante esta situación, el doctor Carlos Blanco, presidente de los Hospitales Doctors’ Center, deploró la posibilidad de que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), detenga el suplido de diésel a hospitales privados.

“Sería una locura que se abandone a los hospitales así, cuando aún estamos tan dependientes de diésel”, dijo.

En su caso, Blanco comentó que han estado en contacto con la empresa PUMA para este suplido.

“Pero tenemos que ir con el cheque en mano y (vienen) cuando ellos puedan”, indicó.

Blanco resaltó que aún los hospitales que ubican en los municipios de Manatí y Vega Baja continúan sin servicio eléctrico, por lo que dependen de plantas para mantenerse operando.

“Ya llevamos 28 días en generadores, haciendo milagros (para que sigan prendidos). FEMA nos está ayudando (con el diésel). El problema principal es que los generadores se pueden dañar porque ya es mucho tiempo (prendidos)”, dijo.

En declaraciones escritas, Deliris Aquino, portavoz de FEMA,  informó que “se espera que, según vaya mejorando la situación del sistema eléctrico, muchos  servicios, incluyendo  hospitalarios y comerciales, entre otros, vuelvan a la normalidad”.