El Comité de Amigos de Monseñor Daniel Fernández expresó este miércoles que recibió “con amor fraternal” al monseñor Alberto Figueroa, quien fue nombrado por el papa Francisco como el obispo de la Diócesis de Arecibo.

En declaraciones escritas, el grupo que ha reclamado por una audiencia papal desde abril para que restituyan al entonces obispo removido por supuestamente desobedecer al pontífice solicitó que el nuevo monseñor “dé continuidad a la obra pastoral de monseñor Daniel Fernández, en particular sus iniciativas en favor de la vida, la familia y los jóvenes, en consonancia con la dotrina católica y el Evangelio”.

Igualmente, le pidieron a Figueroa que apoye su lucha “para que se investiguen y se corrijan las injusticias cometidas” en el proceso que llevó a la remoción de Fernández, quien dijo entonces que sentirse “bienaventurado por sufrir persecución y calumnia”.

“El proceso llevado a cabo en el caso contra el Monseñor Fernández se aparta totalmente del espíritu sinodal al que nos ha llamado a vivir en la Iglesia el papa Francisco y, como consecuencia, subsisten profundas heridas entre el clero, los religiosos y los laicos de la diócesis de Arecibo que deben ser sanadas”, expresa el grupo, quien recalcó que nunca se prestó atención a la petición que apoyaron más de 30 mil personas que pidieron justicia por el líder religioso destituido, quien ha sido conocido por ser vocal contra el derecho al aborto y la educación con perspectiva de género.

“La falta de apertura al diálogo y ausencia de misericordia duele y no se puede convertir en la forma de conducirse dentro de la Iglesia. Estaríamos dando un muy mal ejemplo al mundo.  Como resultado de este proceso, se privó a un pueblo de un gran pastor y se ha tratado de manera injusta a un hombre de Dios que no cometió ningún delito ni falta”.

Por otro lado, el comité convocó a una actividad el próximo martes, 20 de septiembre, para apoya tanto el nuevo monseñor y mantener vivo el “legado” de Fernández.