Fusión de mar con naturaleza en Maunabo
El municipio costero, ubicado al este de la Isla, ofrece al visitante una experiencia única.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
PUBLICIDAD
Con el fin de conocer los encantos que hacen única a nuestra Isla, la Compañía de Turismo hizo un recuento de uno de los municipios que cuenta con recursos naturales únicos: Maunabo.
Conocida como La Ciudad Tranquila y el hogar de Los Jueyeros, Maunabo acuna la Reserva Natural del Humedal Punta Tuna, la que cautiva por su diversidad de flora, fauna y los ecosistemas que se interrelacionan.
El lugar fue certificado recientemente dentro del Programa de Instalaciones Sostenibles de la Compañía de Turismo.
Allí convergen tres tipos de humedales: pantano de agua salada, representado por un manglar; pantano de agua dulce, por un pantano del fruto del Cayur (árbol de la familia de la guanábana) y una ciénaga de agua dulce.
Además, cuenta con la hermosa y conocida Playa Larga, enmarcada por arena dorada que sirve de escenario para el impactante Faro Punta Tuna.
“La visita a Punta Tuna nos lleva a vivir la aventura de explorar la naturaleza de Puerto Rico y admirar los árboles de ceiba, palmeras, el camino de los almendros, flores silvestres de hermosos colores, respirar el aroma que expiden los sembradíos de malagueta, mientras puedes observar diversas especies de mariposas blancas, amarillas, negras, anaranjadas, entre otras que parecen pintadas a mano”, explica la Compañía de Turismo.
Allí conviven alrededor de 50 aves residentes y migratorias, como el zumbadorcito verde, el crestado, la garza real, la blanca y la del ganado, la yaboa común, el pájaro carpintero, el pizpita de mangle, la gallareta, el San Pedrito, entre otros.
Los amantes del avistamiento de aves, pueden utilizar la torre diseñada para este propósito. También se pueden encontrar con la tortuga terrestre puertorriqueña o jicotea, el juey común, pelícanos, la iguana común, coquíes, la ranita labio blanco y otras especies.
Para conocer sin prisa otros atractivos del municipio, como sus paisajes, gastronomía, historia de la plaza del pueblo y el trato acogedor que brindan los maunabeños, lo ideal es quedarse allí.
Una opción es el Parador Mauna Caribe, una hospedería que cuenta con una piscina infiniti, con el espectacular azul del mar como fondo.
Sus pintorescas habitaciones, estratégicamente ubicadas cuentan con todas las comodidades para una plácida estadía. Además, cuenta como opción la Oferta Familiar ‘todo incluido’, si así lo prefiere, restaurante con un menú muy diverso, spa, área de hamacas y voleibol playero, salón de billar y de actividades, entre otras amenidades.