Fotoperiodista de GFR Media comparte sus imágenes con estudiantes de Barranquitas
Al llegar hoy a la escuela especializada Luis Muñoz Marín, Dennis Rivera Pichardo quiso compartir sus imágenes más impactantes con alumnos de undécimo y duodécimo grado
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
PUBLICIDAD
Dennis Rivera Pichardo aspiraba ser médico para poder seguir los pasos de su abuelo, pero su alimento diario era la noticia pues creció en una familia de periodistas, así que no era descabellado el pensar que este inquieto bayamonés se enamorara de esta profesión.
Sin embargo, fue en un viaje de ayuda humanitaria a Nicaragua lo que definió el futuro de Rivera Pichardo que, en ese momento decidió que quería documentar historias por el resto de su vida. Tenía solo 17 años.
Al llegar hoy a la escuela especializada Luis Muñoz Marín de Barranquitas, el fotoperiodista de GFR Media quiso compartir sus imágenes más impactantes con alumnos de undécimo y duodécimo grado que sin pretenderlo, le hicieron revivir una etapa importante en su trayectoria.
Relacionadas
“Consumimos imágenes todos los días, de diferentes formas. Hay fotos bien buenas y hay fotos muy malas. Los fotoperiodistas tenemos el compromiso de hacer fotos buenas que le interesen a la gente, pero sobre todo informar, para documentar los hechos que se convierten en noticia en el país”, relató el encargado del área audiovisual de El Nuevo Día y Primera Hora.
“Las fotos nos cuentan una historia, nos cuenta un hecho y nos lleva a un lugar donde pasó algo que no todos pudimos ver y las fotos, al igual que los reportajes en el periódico cuentan y forman parte de la historia. Una foto es una fracción de segundo congelada por una cámara” agregó Rivera de 33 años, hijo del fotoperiodista Dennis Rivera de TeleOnce e Isabel Pichardo de Radio Universidad de Puerto Rico.
Recordó que el trabajo de un periodista comienza cuando la mayor parte de la sociedad está lidiando con desastres naturales, emergencias y otras situaciones que representan la señal de salida en medio de los acontecimientos.
“El trabajo de un fotoperiodista puede ser tan ‘cool’ como documentar el concierto de Bad Bunny o no tan ‘cool’ como documentar un desastre natural o un hecho noticioso más serio. En los momentos donde todo el mundo está pasándola mal, tenemos que ir a capturar imágenes para sacarlas al mundo y contar historias”, manifestó el egresado de la Universidad de Puerto Rico a donde completó un bachillerato en Antropología y una maestría en Periodismo.
Para mostrar su experiencia, Dennis proyectó varias fotografías sobre la cobertura del desastre ocasionado por el huracán María en el 2017.
“Estaba en República Dominicana cuando pasó el huracán Irma. Regresé a Puerto Rico el día antes de que pasara el huracán María y sabía que no iba a poder ver a mi familia en dos o tres días. Nosotros dejamos a nuestra familia lo más seguro que la podamos dejar y salimos a la calle a buscar la noticia. Me llevé ropa para tres días, pero no dormí en mi casa por 35 días. Así estuve durmiendo en la redacción, en el carro, durante 35 días. Era complicada la distribución y nuestra misión era informar a la gente fuera de Puerto Rico”, confesó.
Entre las imágenes que compartió con su atenta audiencia, estaban la ruta de reconocimiento a las islas municipios de Vieques y Culebra, sin saber lo que ocurría en las demás zonas a donde sus colegas hacían lo propio.
De otra parte, Rivera que ha colaborado con prestigiosos periódicos estadounidenses como The New York Times, The Washington Post y agencias de noticias, puntualizó la importancia de identificar personajes que acompañen una historia.
“Parte de nuestro trabajo es buscar personajes. Eso nos conecta con la gente. Esa imagen nos transmite sentimientos y podemos inferir lo que está pasando en la vida de una persona”, sostuvo al explicar otras fotografías tomadas en San Lorenzo, Las Piedras, Morovis y Humacao, entre otros pueblos a donde acudió en busca de relatar lo que estaba pasando.
Sin embargo, luego de recorrer la historia en distintas épocas, el fotoperiodista aseguró que su experiencia con los alumnos barranquiteños fue “bien emocionante”.
“Me sentí que yo en algún momento fui ellos y recuerdo una charla de Ismaelito Fernández cuando yo tenia entre 11 a 12 años en el Taller de Fotoperiodismo, cómo un fotógrafo que yo admiraba me enseñó y me contó sobre sus imágenes. Eso me hizo amar esta profesión y convertirme en el fotoperiodista que soy hoy.”, asintió.
“Me gustaría ayudar a los jóvenes de Puerto Rico. Vivimos en una época muy visual donde los niños y jóvenes lo que ven es Instagram, videos y fotos y creo que es el mejor momento para poder enseñar fotografía porque todo el mundo consume fotos y videos”, concluyó.