A un mes de que el papa Francisco haya destituido a Daniel Fernández como obispo de Arecibo, un grupo de laicos se reunió este sábado en la plaza pública de la Villa del Capitán Correa para anunciar que han recogido 30,000 firmas entre católicos y protestantes que reclaman una audiencia papal para que el monseñor regrese a su cargo.

Según informó el portavoz del Comité de Amigos del Monseñor Daniel Fernández, el abogado Carlos Rodríguez, “la idea del grupo es que se escuche la voz de los laicos que entendemos no fue escuchada cuando se tomó la decisión”.

Explicó que los firmantes “piensan que el monseñor fue un gran pastor y queremos que se reconsidere esa decisión”.

Las firmas fueron recogidas en el pasado mes a través de las parroquias católicas, principalmente en los municipios que componen la Diócesis de Arecibo. También ha ayudado en el proceso el grupo Coalición Vida y Familia, que reúne iglesias protestantes.

Contó que el grupo protestante “siente agradecimiento con el monseñor Daniel Fernández, porque cuando tocaron puertas, él se las abrió. Apoyó la marcha en contra la ideología de género”.

Rodríguez contó que en esta actividad pública que realizaron este sábado, las personas tuvieron oportunidad de llevar todas estas firmas recolectadas. Allí también se habló sobre Fernández, se oró y distintos grupos musicales alabaron a Dios.

Además, la actividad sirvió para vender camisas con el mensaje insigne del ahora exobispo de Arecibo: “No hay temor en el amor”.

Una vez pase Semana Santa, el grupo en apoyo a Fernández comenzará el proceso para pedirle al arzobispo metropolitano de San Juan, Roberto González Nieves, así como al nuncio apostólico en la República Dominicana y quien tiene a cargo Puerto Rico, Ghaleb Moussa Abdallah Bader, que soliciten una audiencia en el Vaticano para que se les escuche.

Rodríguez explicó que este es el orden decretado por Roma para clamar por una audiencia. Pero, si no reciben una respuesta positiva de estos religiosos en su función de conseguirles una audiencia en Italia, buscarían alguna otra manera de lograr su cometido. Es que el grupo desea viajar al Vaticano para entregarle a las personas adecuadas el reclamo que realizan para que se le dé la oportunidad a Fernández de defenderse.

“La idea es ir a Roma a llevar las firmas y cartas que se han recogido. La intención es que el papa y el prefecto de la congregación de obispo puedan tener información que entendemos no tuvieron durante el proceso (para remover a Fernández como obispo de Arecibo)”, manifestó el abogado.

Relató que en el 2012 hubo una investigación contra el arzobispo González Nieves y el papa envió a un visitador apostólico que investigó los argumentos que se hacía en su contra. Sin embargo, los feligreses de Arecibo reclaman que para Fernández “no hubo un proceso abierto”.

Rodríguez planteó que a los católicos de la Diócesis no se les escuchó para dar a conocer todas las buenas obras que el monseñor realizó en su función como obispo.

Fernández fue removido el pasado 9 de marzo por el papa Francisco, luego de que se negara a renunciar voluntariamente al cargo. Se le imputó no ser obediente al papa ni tener comunión con sus compañeros obispos.

Específicamente, Fernández se promulgó en contra de la vacuna contra el COVID-19 y firmaba exenciones religiosas para que las personas no tuviesen que vacunarse, cuando la iglesia católica promovía la inoculación. Además, se le imputó negarse a trasladar seminaristas de su Diócesis al nuevo Seminario Interdiocesano de Puerto Rico.

Rodríguez comentó que, si se da la audiencia en el Vaticano, podrán saber “qué piensen los laicos sobre el monseñor, cuál fue su experiencia y qué tenemos que opinar de él”.

Por otro lado, el portavoz informó que el monseñor se ha mantenido en el pasado mes celebrando misas privadas.