La bebé que nació en el hospital Wilma N. Vázquez de Vega Baja fue finalmente entregada a su familia luego que por días se debatiera la custodia de la menor.

La progenitora, identificada como Jackeline Jones, oriunda del estado de Nueva York, salió con la infante en sus brazos luego que la menor permaneciera casi dos semanas en la institución médica por haber nacido prematuramente a las 35 semanas de gestación.

“Estoy muy feliz por tener a mi bebé. Estoy lista para regresar a mi casa, estamos felices de tenerla con nosotros”, expresó la joven a los medios de comunicación, al tiempo que destacó que el papá de la recién nacida rompió en llanto al conocer la buena noticia mediante una llamada telefónica.

“Ahora que estamos aquí, que la tengo en mis brazos, ya estoy lista para irme, estoy feliz”, reiteró.

Por su parte, Sharlie Mciver, la abuela de la infante y quien permaneció en Puerto Rico durante toda la polémica, se expresó agradecida de que el suceso ya llegó a su fin.

“La gloria es de Dios, la gloria es de Dios”, expresó Mciver, quien dio las gracias al Departamento de la Familia y el personal del hospital que cuidó a la menor.

En horas de la mañana, el hospital indicó en declaraciones escritas que había recibido del Departamento de la Familia “la autorización necesaria para poder entregar la menor a su madre” luego que la secretaria interina del Departamento de la Familia, Ciení Rodríguez Troche, expresara ayer, martes, que la progenitora “ostenta la patria potestad”.

Además, la jefa de DF informó que el equipo social de la Administración de Familias y Niños (ADFAN) continuará asistiendo a la familia para asegurar el bienestar de todos sus integrantes.

Anteriormente, Rodríguez Troche aclaró ante la prensa que la custodia de la menor se había mantenido en todo momento con el hospital. Sin embargo, “la patria potestad, siempre la mantuvo mamá, porque nunca ha habido un proceso de remoción de patria potestad”.

El pasado viernes, la madre de la infante se expresó ante los medios televisivos que ella nunca abandonó a su hija recién nacida, luego que trascendiera que esta, junto a su pareja, salieron de Puerto Rico a Nueva York por asuntos personales.