En una jornada de 24 horas en Puerto Rico se contabilizaron 2,096 personas sin hogar y de estas, el 55.4% confrontaban la dura realidad de estar sin un techo seguro por primera vez en sus vidas, mientras se evidencia un aumento de adultos mayores atravesando esta peligrosa inestabilidad.

Así lo reveló el último informe de Conteo de Personas Sin Hogar en la isla que se lleva a cabo cada dos años por disposición del Departamento de la Vivienda Federal (HUD), un análisis que no pretende ofrecer la cantidad exacta de ciudadanos que viven en la calle, pero que ayudan al gobierno y a las organizaciones que sirven a esta población a tener un perfil del escenario que confronta la isla e identificar tendencias y áreas de necesidad para hacer una planificación adecuada de servicios.

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Esta encuesta la llevan a cabo cientos de voluntarios de los dos Centros de Cuidado Continuo que hay en Puerto Rico, grupos colectivos de proveedores de servicios para personas sin hogar que lideran los grupos de planificación para los esfuerzos financiados por HUD. Cada CoC puede acceder hasta $20 millones en fondos que ayuden a proveer vivienda a la población vulnerable de la isla e implementar sistemas de prevención.

Los hallazgos del conteo -que se llevaron a cabo en un periodo de 24 horas el pasado mes de enero- destacan que el más de la mitad de las personas sin hogar identificadas -un 55.4%- estaban enfrentando el sinhogarismo por primera vez, lo que refleja un alza en comparación con el 51% que reflejó en este renglón el conteo efectuado en el 2022. Un bebé de un año es la persona de menor edad en el grupo, mientras que un anciano de 93 es la persona con más edad.

“Las razones mayores de estar en calle por primera vez son consumo de drogas (41.9%), problemas familiares (34.3%), problemas financieros (16.9%), desempleo (15.9%) y problema de salud mental (14.1%)”, acotó Anitza Cox, directora de análisis y política social de Estudios Técnicos Inc., entidad encargada de analizar los datos.

Cabe señalar que de las personas contabilizadas el 68% no estaban albergadas y un 73% de estas presentaba alguna condición de vulnerabilidad, como consumo de alcohol o drogas, condiciones de salud mental o algun impedimento físico.

Adultos mayores: rostro del sinhogarismo

Sin embargo, uno de los datos más desgarradores del conteo es que el 37% de los desamparados son de 55 años o más. De estos, el 14% tiene 65 años en adelante y la mitad de estos seres humanos enfrenta el sinhogarismo por primera vez. El escenario se complica cuando se destaca que el 84.1% de los 296 viejos y viejas en condición de calle no estaban albergados y pernoctan en alguna estructura abandonada, en una acera, en un parque o donde les coja la noche.

El análisis menciona que el 75% de esta población adulta reportó estar en situaciones de vulnerabilidad como la adicción a drogas o alcohol. Otros presentan problemas de salud mental o tienen algún impedimento físico.

Belinda Hill, fundadora de Sólo por Hoy y directora del CoC 502 que atiende el sinhogarismo en pueblos del norte y centro de la isla, acotó a Primera Hora que los desahucios son detonantes en que muchos adultos mayores queden desprovistos de un techo seguro.

“Nosotros tuvimos recientemente una ejecución de un anciano de 92 años con un hijastro de 67 porque el hijastro dejó de pagar la hipoteca hacía 8 años y entre el huracán María y luego la pandemia, literalmente, pasaron muchas cosas. A ellos los sacaron a la acera con todos sus tereques”, reveló al indicar que semanalmente puede atender hasta dos desahucios, mientras que años atrás se observaba uno entre meses.

Se contaron 541 mujeres sin techo

Otro punto preocupante, es que en el periodo del conteo se entrevistaron a 541 mujeres sin hogar, de las cuales 68.1% no están albergadas. Al conversar con ellas, el 61% afirmó que enfrentan el desamparo de estar sin techo por primera vez.

“Vemos que cinco de cada 10 enfrenta el sinhogarismo con hijos menores de 18 años”, explicó Cox.

Se informó, además, que el 27.1% de estas mujeres son víctimas de algún tipo de situación de violencia de género, doméstica, sexual o acoso.

Jóvenes en la calle

La población juvenil tampoco está exenta de estas situaciones de vulnerabilidad social, pues se determinó que el 2.6% de las personas sin hogar identificadas en el conteo son del grupo poblacional de 18 a 24 años. El 69% de estos jovencitos y jovencitas enfrentan el sinhogarismo por primera vez.

¿Qué razones los lanzaron a la calle? Problemas familiares (40%), el uso de drogas y alcohol (33%) y situaciones de violencia de género (30%) son las primeras tres causas.

De otra parte, se informó que 30 de los jóvenes sin hogar respondieron otro ciclo de preguntas a fin de conocer mejor sus perfiles y necesidades. Las respuestas fueron impactantes pues un 30% dijo haber estado en alguna ocasión en una institución juvenil, centro de detención o cárcel.

Asimismo, un 13.3% alguna vez estuvo en un hogar de crianza o bajo la tutela del estado, mientras 13% no completó su escuela superior.

¿Qué se puede hacer?

No hay soluciones mágicas, pero expertas como Hill indican que urge que los políticos del país fomenten política pública que abone a tener más viviendas asequibles, precisamente, en momentos en que casi no hay inventario de propiedades que se utilizan para renta y que suplen a las organizaciones sin fines de lucro en su lucha contra el sinhogarismo.

Por su parte, Yesenia Mojica Figueroa, presidenta de la Junta de Directores del CoC PR-503 y Coordinadora Moriviví señaló: “Uno de los principales retos que enfrentamos en el CoC PR-503 es el mito que el sinhogarismo es un fenómeno urbano. Esto lleva a la concentración de fondos y recursos en San Juan y el área metropolitana extendida, dejando vacíos de servicios en el resto del archipiélago. El sinhogarismo rural puede que no sea tan visible, pero es real. Tenemos que crear conciencia de las necesidades de vivienda y servicios en las áreas rurales. Por esto, esfuerzos como el del Conteo son importantes y necesarios. Necesitamos datos certeros que reflejen la realidad del sinhogarismo en Puerto Rico y que sirvan para informar nuestras estrategias, soluciones y formulación de política pública”.

Al final de la presentación de los datos del conteo, hubo la participación de un panel de reacción para obtener la opinión del sector académico en el área social y de salud pública. El objetivo de este panel fue ofrecer recomendaciones y estrategias que redunden en beneficio de la población sin hogar de manera integral, buscando lograr la autosuficiencia y la retención en alternativas de vivienda.