Es el rostro del vecino, la abuela o el amigo. Es el rostro de nuestra gente, con ojos que han sufrido nuestras tristezas y labios que han gozado nuestras victorias.

Son los rostros plasmados en el proyecto artístico “Miradas del barrio”, la quinta edición de Yaucromatic que embellece la Plazoleta de El Cerro en el casco urbano de Yauco con vibrantes murales.

En esta ocasión, el fundador de la entidad Arte para unir y creador de Yaucromatic, Jonathan “Pito” Hernández León, se inspiró en la obra de un artista francés, identificado como JR, quien imprimó fotos de gente y adornó las favelas de Brasil. Fue así que visualizó “Miradas del barrio” y se dio a la tarea de conseguir a los artistas más “top” del mundo para que dieran vida al concepto en Yauco.

Y, aunque el proyecto aún no ha culminado, ya logró cautivar los corazones de los yaucanos y cibernautas con el rostro de doña María Monserrate, querida en el pueblo y conocida como “Monse”.

10 Fotos

“Yo me siento más que agradecida. Muy feliz. Bueno, contentísima, contentísima, contentísima”, compartió con Primera Hora doña “Monse”, quien tiene 78 años.

“A ‘Pito’ lo conozco de toda la vida, porque es de aquí del barrio y un día nos pusimos a tomar café y me tomó una foto y me dijo ‘va a venir un pintor’ y yo ‘ay, ‘Pito’, ¿de verdad?’ y en par de semanas llegó a casa con el pintor y yo, pues, muy feliz de la vida”, recordó.

El mural de “Monse”, quien es madre de cuatro féminas, un varón, además de abuela, bisabuela y tatarabuela, es fruto de la ingenio del argentino Maximiliano Bagnasco, cuyo fuerte es, precisamente, capturar el realismo de los sujetos que inmortaliza, por lo que ha dejado su huella en Kosovo, Albania, Miami, Jamaica e Italia, entre otros lugares del mundo.

Hasta el momento, esta edición de Yaucromatic comenzó con cinco murales, todos de rostros de residentes de El Cerro. Dos de ellos son pintados por Bagnasco: “Monse” y Ángel Torres Santos, conocido como “Gelín”, padre, abuelo y bisabuelo de 73 años, quien por 55 fue sepultero.

“Feliz, feliz, porque yo soy de la quinta generación que vivimos aquí”, dijo “Gelín” mientras Bagnasco pintaba su mural.

“Es una expresión del rostro de aquí de la comunidad. Son personas mayores que han luchado contra toda adversidad y han permanecido en El Cerro. Son personas que vivieron los peores episodios de violencia que se vivieron aquí en las pasadas dos décadas y permanecieron en el lugar. Criaron sus hijos de la mejor manera y están aquí, y es la mirada que cuando cualquier persona común y corriente entra al pueblo, es con la que se van a encontrar: el rostro sonriente de ‘Monse’ dándole la bienvenida, el de ‘Gelín’ hablándole de los gallos. Es lo común”, detalló Hernández León.

El proyecto también incluye las caras de dos niños: Jexiel (pintado por Xolaka, de Valencia, España) y Daniel (por Diego AS, de Galicia, España). Próximamente, se comenzará a pintar el quinto mural, que ilustrará el rostro de una niña.

“También, retratamos niños, que están viviendo los mejores momentos del barrio. Los retratamos para que ellos también se inspiren y sean buenas personas”, agregó Hernández León.

Por su proximidad a la autopista PR-2, los conductores suelen mirar hacia arriba a El Cerro desde sus automóviles. Ahora, se encontrarán con las miradas realistas de estos yaucanos, “invitando a que vengan a El Cerro y que vean la transformación que estamos haciendo aquí”.

“No estamos retratando profesiones, no estamos retratando personas que se han destacado en algún ámbito. No. Solamente estamos retratando lo común, la gente del barrio”, reiteró Hernández León al mencionar que, junto al municipio, se está trabajando con mejorar la calidad de vida de los residentes del lugar más empobrecida del municipio sureño.

“Aunque huracanes y todo, me quedo aquí. De aquí para el cementerio”, subrayó doña “Monse”.

El proyecto continuará retratando a más yaucanos, anticipó Hernández León. Por ende, esta edición, a diferencia de las anteriores, no tendrá inauguración.