Luquillo. El escenario en la Capital del Sol es de penumbra. A nueve días del paso del huracán Irma por Puerto Rico, el 50% de la población de Luquillo no tiene servicio de energía eléctrica ni de luz y, lo que es peor, el sombreado panorama incluye a unas 60 familias que lo perdieron literalmente todo con la furia del ciclón.

El censo de damnificados también incluye a otras más de 200 familias, cuyas casas quedaron con “serios daños en la estructura de su propiedad”, explicó a Primera Hora el alcalde Jesús “Jerry” Márquez.

 Ayer el Ejecutivo Municipal urgía a la buena voluntad de comerciantes, ferreteros, albañiles y personas con conocimiento en construcción para que estrecharan lazos de solidaridad con el municipio que fue incluido por el gobernador Ricardo Rosselló entre los 27 pueblos para los que se solicitó la declaración presidencial federal de desastre.

“No hay ayuda humilde, toda es bienvenida… (El escenario) aquí es igual o más que esos pueblos (Loíza, Vieques y Culebra)”, dijo en referencia a los municipios que mayor atención pública han obtenido tras darse a conocer la devastación que dejó en estas áreas los vientos del huracán Irma, cuya trayectoria pasó a 40 millas al norte de la Isla.

“Tenemos unas 60 casas que no les quedó nada, absolutamente nada y tenemos más de 200 hogares que resultaron con pérdidas mayores ya sea porque parte de la casa se cayó porque un árbol les cayó encima, otras porque el viento les voló parte del techo y familias que perdieron todo lo de adentro (muebles, ropa, enseres)”, explicó el Alcalde.

Agregó que mientras se canaliza la ayuda federal para los perjudicados, se estableció en el Centro de Operaciones de Emergencias de Luquillo -ubicado en el salón de actividades de la urbanización Brisas del Mar- un centro de acopio para que la ciudadanía done alimentos, agua, detergentes y artículos de primera necesidad para los damnificados, en el que se encuentran muchos niños y envejecientes que están refugiados en casas de familiares.

Mientras, las labores de limpieza continúan, particularmente en zonas rurales donde todavía hay “muchos árboles” obstruyendo caminos y vías que dan acceso a comunidades.

Bad Bunny da la mano

El cantante de música urbana Bad Bunny se unió a la iniciativa de ayudar a damnificados en Puerto Rico, incluyendo a residentes de Luquillo a quienes les otorgó un certificado de regalo de $1,000 para que compren materiales de construcción o enseres en la cadena de ferreterías National.

“Sé que están pasando una situación difícil... esto es una ayudita que espero que les pueda servir de algo para comenzar de nuevo. Pa' lante y mucha fuerza y fe”, les dijo el joven a los afectados.

 En un aparte con Primera Hora, el artista -cuyo nombre de pila es Benito Antonio Martínez Ocasio- dijo haberse conmovido al conocer las historias de las cinco familias que conoció.

 “Me consterna... a esas personas mayores se les ve en el rostro la preocupación que tienen. Por eso me siento bien de dar este tipo de ayuda”, manifestó quien también visitó comunidades en Vega Baja, Río Grande y Loíza.

Por su parte, don Alfredo Rivera Corcino, un residente del barrio Sabana que perdió su casita, dijo estar “bien contento” con el gesto del cantante.

 “Ha sido bien fuerte, pero hay que seguir luchando”, expresó el caballero.