Si quiere pasar unos días agradables sin tener que salir de la Isla, aquí le ofrecemos algunas alternativas.

OESTE

Naturaleza, historia y encanto.  Eso es lo que se puede encontrar en uno de los mejores lugares recomendados con el área oeste: la Reserva Natural Las Salinas que ubica al final de la carretera 301 en el sector Llanos Costa en Cabo Rojo.

Este paraíso natural –protegido por el Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre– cuenta con unos 1,249 acres de lagunas salitrales en medio del bosque seco subtropical que carga con las históricas minas de sal, que desde la era de nuestros indios, dieron valor a esta esquinita de la Isla. Esta fue la primera industria de sal en Puerto Rico y Las Américas.

En medio de este escenario se eleva el Faro Los Morillos. Después de los faros de San Juan, este fue el segundo lugar donde se construyó un faro en Puerto Rico, en 1882. Con su reciente reapertura se presta un servicio de trolley disponible para que el público tenga acceso a una de las vistas más extraordinarias.

Y es que a las faldas de este histórico faro, se encuentra una de las playas mejor recomendadas en portales de clasificación para hacer turismo informado. La Playuela es un espacio sin igual, que según el portal Trip Advisor, está posicionada como la atracción número uno en Cabo Rojo y número dieciséis entre las mejores playas del Caribe.


SUR

La Guancha sigue siendo uno de los lugares más visitados en Ponce, un maravilloso lugar donde disfrutará de rica comida, música, una espectacular vista y mucho más.

El complejo recreativo y cultural ubica en el Malecón Sur Final, muy cerca de la autopista Luis A. Ferré.

Desde su creación en el 1998 por el ex alcalde Rafael Cordero Santiago La Guancha es uno de los principales atractivos de la histórica Ciudad Señorial, y se ha convertido en uno de los lugares más visitados por puertorriqueños de toda la Isla y extranjeros.

Con más de 20 kioscos de comida, restaurantes, tarimas de espectáculos y su hermosa vista al Mar Caribe, La Guancha ofrece a sus visitantes un área llena de vida y amenidades para todos los gustos y edades.

Si desea caminar por su remodelado tablado escuchando las olas del mar, si le gusta dar sus pasitos de baile o simplemente sentarse a conversar bajo la fresca brisa, allí encontrará lo que busca.

Si tiene niños también puede llevarle sus bicicletas, ya que cuenta con un área segura designada para ellos.

Una de las más recientes adquisiciones de este lugar y que desde su establecimiento ha atraído a cientos de visitantes es el monumento al cantante ponceño Héctor Lavoe, escultura de tamaño real con la que todos gustan retratarse.

Desde allí zarpa una embarcación que los fines de semana hace viajes al Islote Caja de muerto, otro de los encantos que se pueden apreciar desde La Guancha.

Muy cerca de allí está el Club Náutico donde muchas familias acuden a pasarla bien y disfrutar dando de comer a los peces que se acercan al muelle.

Los visitantes también pueden apreciar las enormes grúas que distinguen al Puerto Las Américas.

La Guancha cuenta con una estación de la policía municipal, baños, amplio estacionamiento iluminado e instalaciones médicas. Así es que llegue hasta Ponce y verá lo bien que la pasará.


NORTE

Dicen que una foto vale más que mil palabras pero para los que han visitado la Cueva Ventana nada se compara con presenciar en vivo y a todo color la espectacular vista que ofrece esta cavidad natural.

Aunque los locales “descubrieron” la cueva hace más de 100 años, no fue hasta la temporada de Semana Santa de 2011 que la curiosidad se apoderó de cientos y miles de visitantes que comenzaron a llegar de todas partes para conocer más de este entorno agreste ubicado entre los municipios de Arecibo y Utuado. Para ese entonces, las personas iban en busca de una piedra en la que, supuestamente, se podía ver la imagen de la cara de Jesucristo, según contó el administrador de la atracción turística, el doctor Froilan Oliveras Tejeiro, quien complementa su amor por la naturaleza destacándose como veterinario.

“Además de la vista panorámica, hay una piedra que tiene la imagen de Jesucristo, que no se ve a simple vista pero sí en las fotografías. Para ese tiempo estaban las redes sociales en pleno apogeo y ahí fue que se empezó a regar la fama”, manifestó.

Hoy día, la famosa Cueva Ventana recibe a miles de personas y, de acuerdo a los estimados de Oliveras Tejeiro, en verano pueden llegar entre 500 a 600 visitantes diarios.

Destacó, además, que la experiencia de visitar la cueva se ha ido transformando conforme pasan los años. Por ejemplo, los excursionistas ahora reciben una visita guiada que dura aproximadamente 45 minutos. Además, se les entregan cascos de seguridad y linternas.

“Es un ambiente sumamente seguro, la vista es espectacular y el guía les va explicando cada uno de los detalles que esconde esta maravillosa cueva”, indicó el presidente de Salome Ecoturismo, la empresa a cargo de la instalación turística, que está abierta todos los días, de 10:00 de la mañana hasta las 5:30 de la tarde.

La entrada cuesta $10 por persona.


ESTE  

Con un flujo anual de casi un millón de visitantes, el Bosque Nacional El Yunque, es quizás la atracción más frecuentada y más conocida de la región este de Puerto Rico.

Este bosque, que es el único pluvial tropical en el sistema de parques del Servicio Forestal de los Estados Unidos, consta de unas 11,112 hectáreas (unas 28,900 cuerdas de terreno) y se distingue por su clima tropical y su gran biodiversidad.

La mayor parte de los terrenos del bosque componen la Sierra de Luquillo y alcanza una altura de mil metros por encima del mar. Sus empinadas y espesas laderas reciben anualmente hasta 508 centímetros de lluvia en su parte más elevada.

Este, también es el hogar de miles de plantas autóctonas: 150 especies de helechos, 240 especies de árboles -88 de estos son endémicos y 23 se encuentran solamente en el bosque.

Entre las principales atracciones de El Yunque se destacan el centro de información El Portal, las torres Yokahú y Britton, las cascadas La Mina y La Coca así como decenas de veredas por donde los visitantes pueden adentrarse de manera segura en el majestuoso bosque.

La administración de El Yunque está a cargo de cinco grupos de trabajo: el Equipo de Manejo de Ecosistemas y Planificación, el Equipo de Administración de las Propiedades y Servicios Administrativos, Servicio al Cliente y el Equipo de Orden Público, todos bajo la dirección del supervisor forestal, Pablo Cruz.

La misión de estos equipos es proveer programas y servicios para el manejo ambiental del bosque, proveer servicios de mesura y manejo de instalaciones, servicios de información a los visitantes y mantener el orden dentro de los límites del bosque.