Cruz Roja instalará detectores de humo en varias viviendas
También entregarán a las familias una hoja magnética para colocar en la nevera, con un plan de escape que les ayudarán a diseñar.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
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Conscientes del problema que representan los fuegos de hogares, la Cruz Roja Americana en Puerto Rico lleva a cabo un esfuerzo como parte de una campaña en todos los Estados Unidos, para instalar más detectores de humo en viviendas.
De acuerdo con Lee Vanessa Feliciano, ejecutiva regional de la organización, esta campaña que busca reducir la incidencia de fuegos tendrá un día fundamental el próximo 27 de abril, cuando se instalarán más de mil detectores de humo en residencias del barrio Rullán de Adjuntas, el barrio Daguao de Naguabo y el barrio Juan Domingo de Guaynabo.
Además de la instalación de detectores de humo, entregarán a las familias una hoja magnética para colocar en la nevera, con un plan de escape que les ayudarán a diseñar. También entregarán material educativo para prevenir incendios.
“La meta es instalar más de mil detectores de humo en varias residencias”, afirmó Feliciano, explicando que la instalación es totalmente libre de costo y que la cantidad a instalar variaría según la necesidad que determinen en cada vivienda, teniendo en cuenta, por ejemplo, si tiene dos pisos o si residen personas de avanzada edad o con problemas de movilidad.
Feliciano explicó que, de todas las emergencias que atienden, los fuegos en el hogar son la que más ven. Agregó que atienden unos 22 fuegos al mes, si bien la escala de los daños varía desde los localizados en la cocina a destrucción total de la vivienda. La Cruz Roja ayuda a las familias con una donación básica de dinero y asistencia de salud mental u otros asuntos, como la recuperación de medicamentos que puedan haber perdido en el fuego.
Indicó que la Cruz Roja ya ha instalado más de 9,000 detectores de humo y que el esfuerzo “busca impactar comunidades donde hay más necesidad desde la perspectiva económica y donde viven personas de edad avanzada, que son un grupo que está entre los más afectados por incendios”.