Conveniencias de la cremación de cadáveres
El precio de cremación, que comenzó a $500 hace 20 años, hoy ronda en los $795.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 10 años.
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Aunque muchos prefieren los ritos funerarios tradicionales, la utilización de ataúdes, el entierro en un cementerio y la compra de un terreno para nuestros muertos, cada vez son más las personas que se inclinan por la cremación, porque entienden que es más económico y conveniente.
“La cremación es más económica. No solo es menos costosa, sino que economizas terreno. No contaminamos la tierra con nuestro cuerpo, ni el ambiente”, dijo Millie Castellano, presidenta de Celestium.
Castellano, viuda de Eliseo Rodríguez Pardo, fundador del crematorio, quien falleció hace cinco meses, relató que cuando comenzaron con la cremación, en 1987, los primeros que se opusieron, según ella, fueron los agentes funerarios, porque les afectaba su negocio.
“Lo tradicional era gastar dinero en un ataúd, en embalsamamiento, en agente funerario y el pago de alquiler de capilla”, dijo la empresaria.
“No contaminas la tierra ni el ambiente. Mi esposo decía que la tierra es para los vivos, no para los muertos”, apuntó.
El servicio de cremación cuesta $795, indicó, e incluye el traslado del cuerpo del lugar de fallecimiento a Celestium, cremación, el envase donde se depositan los restos y el certificado de cremación. Además, hacen los trámites forenses y registran el certificado de defunción.
“Incluye la refrigeración, porque el cuerpo se quema después de las 48 horas de haber fallecido”, dijo.
¿Cuánto se ha elevado el costo?
“Cuando nosotros empezamos, en 1987, era de $500. Hoy, 26 años después, son $795”, acotó.
No creman animales
Castellanos relató la anécdota de una mujer que había firmado un prearreglo, en el que dispuso que, cuando ella muriera, las instrucciones eran llevar su perrito al veterinario para dormirlo y cremarlo.
“Yo le dije a ella: 'Nosotros no cremamos mascotas'. 'No te preocupes, que yo voy a buscar un sitio que lo hagan'. Ella quiso que se mezclaran las cenizas con las de su perro. Las amigas unieron las cenizas”, relató.
La empresaria se ufana de que su esposo fue pionero, no solo en la cremación de cadáveres en Puerto Rico, sino en el reciclaje de neumáticos, incineración industrial de desperdicios sólidos no peligrosos y tecnología moderna para crema de cadáveres.
“Se le llama cámara de cremación. Nuestra tecnología es la más moderna. Es computarizada. Una cremación puede durar hasta 70 minutos. Esos equipos son monitoreados desde Holanda. Ellos nos los instalaron. Ellos saben cuándo comienza la cremación y cuando hay problemas”, dijo.
¿Qué problemas?
“Que pueda dañarse una pieza”.
¿No confunden un cuerpo con otro?
Ah, bueno. Yo te garantizo que aquí no pasa eso. Somos celosos con el servicio que prestamos.
¿No les dan cenizas equivocadas?
No, no. Se crema cada cuerpo individualmente. Todo cuerpo, cuando se recoge, se identifica en el dedo y en el bulto, en el que se le lleva, por respeto.