ARECIBO Residentes de la comunidad Islote II en Arecibo realizaron ayer una protesta frente a la planta de composta de esa ciudad para denunciar los problemas de salud que presuntamente les han provocado los olores que salen de la instalación.

La planta es propiedad de la Autoridad de Desperdicios Sólidos (ADS), pero es operada por la empresa Caribbean Composting.

En esa instalación se procesa material vegetativo y cieno proveniente de plantas de filtración de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA).

Los vecinos alegan que el fuerte olor que sale de la planta les ha provocado enfermedades respiratorias, así como en la piel y seguidas irritaciones en ojos y garganta que sus médicos relacionan con la contaminación del área.

“Mi hijo tiene una alergia que no se le quita con nada”, mencionó Ramona Oquendo, vecina de las parcelas.

“A mí me gusta vivir aquí y nosotros llegamos primero. Yo no me voy a mudar, que se vayan ellos”, dijo Magie Colón, portavoz del grupo.

Los residentes se quejan porque alegan que la instalación no cumple con medidas de control de contaminación y porque incumple con el horario de operación al supuestamente laboral todos los días.

Desde el 1999, los vecinos de Islote II se han quejado de esta planta, que procesa cieno con el que produce abono y material vegetativo para elaborar mulch.

Colón señaló que la Junta de Calidad Ambiental (JCA) ha hecho varias inspecciones allí a raíz de querellas de los vecinos, pero las recomendaciones de la agencia no se han seguido.

De hecho, en el expediente que mantiene el grupo comunitario están varias cartas del 2000, 2001 y 2006 de la JCA en las que se hacen observaciones y recomendaciones tanto a la Caribbean Composting como a la ADS y en la que ratifica la emisión de olores.

“Hasta el Gobernador ha intervenido y no le han hecho caso”, dijo Colón sobre una carta y un memorando de referimiento de La Fortaleza de diciembre de 2006.

El presidente de la Caribbean Composting, Carlos Rodríguez, insistió en que la operación de la planta está en cumplimiento.

Rodríguez explicó que la planta ofrece un servicio importante para la protección y conservación de nuestros recursos, ya que al reciclar los lodos y el material vegetativo se reducen las descargas al mar y se alarga la vida útil de los vertederos. El empresario sostuvo que los productos que allí se producen son de la más alta calidad.

La gerente de la planta, Marta Avilés, dijo que la buena condición de salud de sus empleados es el mejor ejemplo de que allí no genera enfermedades. Admitió que en la planta se generan olores porque se trabaja “con excremento humano”, pero que la emisión no es tan fuerte como para afectar a la comunidad.

Avilés reconoció que tiene que hacerse una reparación en un sistema de tuberías porque hay un escape, pero que la ADS está en el proceso de realizar ese trabajo.

Negó que operen la planta los fines de semana.

El director ejecutivo de la ADS, Javier Quintana, dijo conocer las quejas de los vecinos y reiteró su disposición a reunirse con ellos.

Se comprometió a evaluar la operación de Caribbean Composting y dijo que se ejecutará un plan para mitigar los olores objetables, entre otras acciones.