Contaminación que no se acaba en playa Sardineras
Organización ambientalista recalca que han encontrado heces fecales en el mar.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 10 años.
PUBLICIDAD
Isabela. La organización comunitaria Rescate de Playas Isabela Inc., manifestó esta semana serias preocupaciones en torno a la descarga de aguas hacia la playa Sardineras -que da hacia el Atlántico- por parte de la planta de filtros de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), que ubica en la carretera 466 en el barrio Bajuras de Isabela desde el 2008.
Según Lourdes Irizarry, presidenta de esta organización ambientalista, bañistas y otros practicantes del deporte acuático han llegado a ver heces fecales flotando en esa playa, por lo que pidió la atención necesaria sobre este asunto, que puede afectar tanto la actividad económica local como la salud de las personas.
“Las playas de Isabela han aumentado su popularidad a nivel mundial por su demanda entre la comunidad de surfers y otros deportes acuáticos que practican los amantes del océano en general”, destacó la líder, quien hizo un llamado a las autoridades para velar por la calidad de las aguas en ese litoral ante los reportes negativos que obtienen como resultado de muestras que constantemente toman de la salida de ese tubo.
“Siendo así, que nuestra comunidad depende del turismo generado por estas actividades y muchos de nosotros vivimos aquí para disfrutar del mar, queremos asegurarnos que en las aguas que nosotros disfrutamos y nuestros visitantes nadan son seguras”, destacó en una carta remitida a la Junta de Calidad Ambiental hace unos meses.
Según detalla, semanalmente se toman muestras de dichas descargas en colaboración con la organización Surfrider Foundation de Rincón y expertos del departamento de Ciencia de la Universidad de Puerto Rico en Aguadilla.
“Continuamos obteniendo resultados que sobrepasan los límites legales de Enterococci, que no deben exceder de 35 colonias por unidad”, dijo Irizarry, mostrando varios informes desde 2013.
Según los documentos suministrados, los niveles de bacteria han apuntado este año hasta sobre 500 colonias. Irizarry mostró preocupación en torno a que tantas violaciones a la ley se vean traducidas en aumentos en la factura de agua.
Por su parte, el director regional de la AAA, el ingeniero Joel Lago, descartó de entrada que pueda haber heces fecales saliendo del ducto, pues explicó que dicha planta de tratamiento trabaja en dos fases, siendo la primera la que remueve ese tipo de material.
El funcionario destacó que la AAA mantiene un permiso de la EPA para descargas al mar desde esa planta, bajo el cual deben cumplir ciertos parámetros.
Lago reconoció que el parámetro que dicta la manera en que se desinfecta el agua de enterococos apunta a que hubo violación para el mes de agosto, cuando reflejó 182 colonias, por lo que se pagó una multa de $2,500.
“Si nosotros tuviéramos situaciones, las multas no se pasan a nuestros clientes. Hacemos los ajustes necesarios para poder establecernos en el parámetro que nos exige la EPA. Si en la factura se incluye un cargo de cumplimiento ambiental es para nosotros poder cumplir y llevar el plan de mejoras capitales para los requerimientos de Salud”, acotó el ingeniero.
Sobre los métodos de muestreo, Lago sostuvo que la AAA se deja llevar por los métodos de la EPA y cuestionó la validez del mecanismo utilizado por Rescate Playa Isabela, por lo que extendió una invitación para que compartan con la AAA sus informes para orientarlos.