El mandatario dijo que según pinta la situación, los sectores que más le preocupan son: Juana Matos en Cataño, Playita en Salinas, Islote en Arecibo y Sabana en Guaynabo.

En esas zonas el plan de desalojo comenzaría “desde ya” debido al riesgo que representan las inundaciones para los residentes.

“Según los escenarios más probables, aparenta que (el huracán María) va a atravesar a Puerto Rico. Reconocemos los esfuerzos que se han estado haciendo en las últimas semanas para restaurar, reconstruir y restablecer la normalidad, pero ahora la invitación nuestra es poder reenfocar esos esfuerzos y reconocer que hay una situación de alta peligrosidad para Puerto Rico en los próximos días”, declaró el mandatario en rueda de prensa.

El huracán María podría dejar hasta 12 pulgadas de lluvia, aunque habrá áreas que pueden recibir hasta 20 pulgadas.

Rosselló recordó que durante huracanes anteriores la causa principal de muertes fueron las inundaciones, por lo que dijo será proactivo en mover personas a refugios previo al paso del evento atmosférico cuyo ojo se espera pase por la isla el miércoles.

Según informó, hasta ayer se habían identificado 450 refugios, seis menos que para Irma, pues hay algunos carecen de agua y luz. No obstante, se habilitaron espacios adicionales en el Centro de Convenciones. 

En total, hay 126,000 nuevos espacios para potenciales refugiados, adicionales a las 192 personas que se tuvieron que ir de sus casas tras el paso de Irma y que permanecen acuarteladas porque no pueden regresar a sus hogares.

No se descartó agregar otras escuelas si se determina que están aptas.

De los refugiados de las islas vecinas, Rosselló dijo que llegaron en total 3,763 personas por avión o barco y muchos de ellos ya no están aquí. Ante la inminencia de este nuevo huracán, ya no llegarán más repatriados, indicó.

Rosselló dijo además que los alcaldes deben trabajar a toda prisa con los escombros que aun no se han recogido tras el paso de Irma, cuyos gastos serán reembolsados en un 100% por la Agencia federal de Manejo de Emergencia (FEMA, por sus siglas en inglés).

En cuanto a los puertos, se esperaba que ayer en la noche se completara la evaluación de las estructuras, hoy en la noche dejan de llegar buques, pero el cierre total sería mañana a las 8:00 a.m.

Previo a eso se espera que llegue un buque con catres adicionales, además de sobre 1.6 millones de litros de agua, 31 generadores, algunos de gran envergadura y unos 80 más pequeños para atender pacientes.

El Gobernador no preveé problemas con el abasto de alimentos, aun cuando Irma dejó daños en el puerto de Jacksonville, Florida, de donde provienen el 70% de los suministros que llegan aquí.

“Tenemos abastos para los refugiados para 20 días y sobre 240,000 puertorriqueños que los puedan necesitar... el secretario de Estado (Luis Rivera Marín) ha monitoreado esos esfuerzos”, aseguró al tiempo en que dijo que se solicitará que se extienda el periodo de exención en las leyes de cabotaje.

Mientras, el servicio de lanchas a Vieques y Culebra se suspenderá hoy en la tarde. 

Dijo que hay fondos adicionales de ayuda a beneficiarios del programa PAN que podrían repartirse en algún momento en la semana, a pesar del adelanto que ya se había desembolsado.

Las clases fueron suspendidas hasta nuevo aviso, incluyendo en el sistema de la Universidad de Puerto Rico. 

Los servidores públicos solo trabajarían hasta hoy al mediodía, pero la Rama Judicial trabajará todo el día de manera regular, incluyendo el Tribunal Supremo, Apelaciones y Oficina de Administración de Tribunales.

Por su parte, Alejandro de la Campa, director de FEMA en la Isla, dijo que ya los puertorriqueños nos hemos levantado de huracanes potentes que han dejado mucho daño.

“Hay que tomarlo muy en serio. La ciudadanía debe prepararse con tiempo... pero tenemos que tener en mente que nos vamos a recuperar más fuertes”, expresó.