Líderes sindicales y estudiantiles reafirmaron este domingo que el próximo miércoles 1 de mayo, día mundial de los trabajadores, tomarán las calles y se manifestarán en contra de las políticas de austeridad y la Junta de Supervisión Fiscal, y en favor del pueblo y los trabajadores.

El grupo adelantó que marcharían hasta la zona de la Milla de Oro en Hato Rey, desde diversos puntos de la ciudad capital donde se congregarán previamente, como la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras, el Departamento del Trabajo o el estado Hiram Bithorn.

Los líderes de la manifestación insistieron en colocar la tribuna donde se harán las expresiones principales, a eso del mediodía, en la intersección de las avenidas Luis Muñoz Rivera y Carlos Chardón. Insistieron en que con esa protesta están “ejerciendo nuestro derecho a la libertad de expresión” e instaron a las autoridades a no bloquear ninguna de las vías de acceso al área, donde están instalados los edificios sede de las principales entidades financieras, tales como bancos y compañías de inversiones y aseguradoras.

“Vamos a marchar contra la Junta (de Supervisión Fiscal) y el gobierno que impulsan una agenda despiadada de privatización. Vamos a marchar contra los despidos de empleados en la empresa privada, las empresas que contaminan el ambiente, la violación a los derechos de los trabajadores y trabajadoras... Vamos a marchar a favor de la justicia social, la participación democrática en la toma de decisiones, garantizar los servicios públicos esenciales como la salud y la educación, la negociación colectiva, la pensión digna vitalicia, y la salida de Junta de Supervisión Fiscal”, reclamó Eva Ayala Reyes, del sindicato magisterial Educamos. “Le estamos haciendo un llamado al pueblo, que se tienen que tirar a la calle. Aquí la vida se nos va”.

Los líderes de la manifestación tendrán este lunes una reunión con directivos de la Policía y fuerzas del orden para establecer planes relacionados con la manifestación, que por los pasados dos años ha reunido a miles de personas y ha terminado con choques violentos entre policías y manifestantes, así como varias personas heridas y arrestadas.

A preguntas sobre la posibilidad de que se impongan algún tipo de restricciones a la manifestación, el grupo de líderes exigió que se les permita marchar usando cualquiera de las vías públicas que ellos elijan.

“El 1 de mayo es un día que vamos a estar en la calle, ejerciendo nuestro derecho a la libertad de expresión”, insistió Ayala. “Le corresponde a la Policía garantizar la seguridad del pueblo. Nosotros vamos a estar tomando las calles… Las calles ese día nos pertenecen. Nosotros vamos a marchar por dónde entendamos que tenemos que marchar”.

“Ellos tienen que respetar nuestro derecho a movernos por las vías públicas”, agregó Luis Pedraza Leduc, de Prosol-Utier. “La Policía de Puerto Rico no puede impedir el paso de los manifestantes en ningún sitio. Los únicos que estarían violando el derecho de libre expresión, derecho que va por encima del falso derecho de protección a estos edificios… La Policía no puede impedir el paso por las vías públicas de los manifestantes”.

Entre los líderes que anunciaron la manifestación e invitaron al pueblo y los trabajadores a unírseles en la protesta, además de Ayala y Pedraza, incluía entre otros a Ángel Rodríguez Rivera, de la APPU (Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios); Mercede Martínez Padilla, de la Federación de Maestros; Liza Fournier Córdova, de Únete, y la estudiante Maya Rodríguez, portavoz del Movimiento Estudiantil universitario.

“Nosotros tenemos derecho a manifestarnos. Nosotros tenemos derecho a marchar. Nosotros tenemos derecho a gritar, tenemos derecho a hablar y tenemos derecho a que se nos escuche. No podemos olvidar que el derecho a la libertad de expresión no es derecho al pataleo, es derecho a que nosotros podemos hablar y podemos decir las cosas de manera pública, para que tengan la obligación aquellos que toman decisiones en el País de escuchar lo que estamos diciendo”, agregó Rivera.

“Las calles son públicas y son del pueblo. Si el gobierno quiere que se detengan las manifestaciones, que se siente con los sectores a negociar y que lleguemos a unos acuerdos sobre cómo vamos a manejar el País. Porque el País no le pertenece a un solo partido político ni a los banqueros, le pertenece a todas y a todos los puertorriqueños”, reiteró Fournier.