Agradecida. Así está Irma Ávila, madre de Sherly Ann Goire Ávila, por la respuesta de la gente en apoyo a la recuperación de su hija de 27 años, quien quedó cuadripléjica por culpa de un incidente de violencia de género.

Desde la tragedia ocurrida el 4 de junio pasado, Sherly está hospitalizada y su familia recibe ayuda al número de cuenta 321392818 en el Banco Popular y de ATH Móvil (787) 342-1487.

Además, para sorpresa de la familia, antenoche recibieron la visita de la comisionada residente de Puerto Rico en Washington, D.C., Jenniffer González, el secretario de Salud, Rafael Rodríguez, y la designada procuradora de la Mujer, Ileana Aymat, y allí escucharon la noticia que tanto ansiaban: Sherly Ann no será trasladada a un centro de rehabilitación en San Germán, como se le dijo en primera instancia sin darle más opciones.

Ella permanecerá en el Centro Médico en Río Piedras, en el hospital de recuperación HealthSouth, como pidió su madre.

“El caso ha impactado tanto, yo se los agradezco”, afirmó la madre.

Pero estos son apenas los primeros pasos en un camino lleno de atención médica permanente, cambios a la estructura del hogar, un proceso legal que a juicio de muchos ha sido lento y una inversión económica y de esfuerzos que continuará ocupando a la familia.

“Ahora la mayor necesidad es que se está habilitando una habitación en nuestro hogar y tuvimos que romper (paredes) y ahí se va bastante dinero, porque hay que habilitar un baño para minusválidos, comprar un generador de energía eléctrica, un aire acondicionado y otros equipos”, comentó Ávila.

En el barrio Guaraguao en Guaynabo, en los bajos de su casa, familiares y amigos colaboran con la mano de obra y aunque el gobierno municipal se comprometió a donar algunos materiales, el tiempo es clave para que la habitación esté lista cuando le den el alta a Goire Ávila. Las donaciones siguen siendo necesarias.

Al cierre de esta edición, fiscalía no había sometido cargos a Alberto García Merced, la expareja de Goiré Ávila.