La secretaria del Departamento de Corrección y Rehabilitación (DRC), Ana Escobar Pabón, decretó un cierre (lockdown) en la Institución de Adultos Ponce 1000. Esto luego que tres oficiales correccionales y 38 confinados arrojaron positivo a COVID -19.

Escobar informó, que también ordenó un cierre preventivo en la Institución Ponce Máxima ya que uno de los oficiales contagiados participó de un registro en esa institución. La secretaria dijo que al igual que las ocasiones anteriores, la agencia activó el protocolo vigente y desde hoy se realizan las pruebas moleculares a todos los empleados y la población correccional.

“Es importante que las medidas preventivas continúen de forma estricta para evitar más contagios. Exhorto a los empleados que tengan síntomas relacionados al COVID-19, a seguir el protocolo establecido y tomar las medidas de prevención y la realización de prueba molecular para detectar si es positivo o no”, aseguró Escobar Pabón.

Como medidas adicionales dentro de la institución, se mantiene el cierre total (lockdown) por lo que no se trasladará confinados desde o hacia la institución. A su vez, se cancelaron las visitas a familiares y actividades programadas en las instituciones o fuera de ellas. Las vistas en tribunales y la Junta de Libertad Bajo Palabra se atenderán de manera virtual, así como los servicios médicos programados, destacó la secretaria del DCR.