El Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston desestimó hoy, jueves, la solicitud presentada por el Partido Popular Democrático (PPD) que cuestionaba una orden del juez de distrito José Fusté para imprimir en inglés y español las papeletas electorales.

Según la orden, el demandante, el comisionado electoral del PPD, Gerardo Cruz, no tiene legitimación activa ("standing") para hacer el reclamo.

"Cruz... no tiene daños y no arriesga nada personal con esta decisión", dice la escueta orden de una página, en la que, entre otros, intervino el juez puertorriqueño Juan Torruella.

El juez Fusté ordenó a la Comisión Estatal de Elecciones el jueves pasado, a 69 días de las elecciones, imprimir las papeletas en español e inglés.

Fusté falló así a favor de los estadounidenses Sylvia Diffenderfer y Robert McCarroll, que reclamaron las boletas bilingües.

"Boston no entró en los méritos", manifestó Cruz a Prensa Asociada.

El funcionario electoral aseguró que esta misma tarde la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) estaría respondiendo la desestimación de Boston, y dio por descontado que el asunto llegue hasta el Tribunal Supremo de Estados Unidos.

"Nosotros (el PPD) llegaremos hasta el Supremo, pero no me cabe duda de que la Comisión hará lo mismo porque el presidente (Ramón Gómez) estuvo leyendo la decisión de Fusté y allí dice que la Comisión está discriminando contra unos electores, y la Comisión no puede aceptar eso así", sostuvo Cruz.

El juez Fusté ordenó a la CEE el jueves pasado —a 69 días de las elecciones— imprimir las papeletas en español e inglés.

Fusté falló así a favor de los estadounidenses Sylvia Diffenderfer y Robert McCarroll, que reclamaron las boletas bilingües.

Datos del Censo de 2000 establecen que el 85.4% de la población en la Isla habla español, 14.4%, inglés y el 0.2%, otro idioma distinto.

El último día para hacer cambios en las papeletas es este viernes.

El presidente de la CEE, Ramón Gómez, ha advertido que es imposible a esta fecha tener papeletas bilingües listas para el día de las elecciones el 4 de noviembre.

Cruz negó que el caso se torne académico toda vez que la fecha de impresión de las papeletas está pautada para el sábado 6.

"(Los tribunales) han actuado con premura y nos respondieron... Tenemos hasta el lunes", expresó.

En Puerto Rico, el asunto del idioma se ha mantenido como un tema de la política, con los anexionistas impulsando el uso del inglés y los no anexionistas rechazándolo, ambos por razones políticas.

En 1992, Puerto Rico recibió el premio Príncipe de Asturias de España por legislar que el español era el idioma oficial de Puerto Rico.

Cuando vino el gobierno de Pedro Rosselló, en 1993, eso cambió y se legisló para que tanto el inglés como el español fueran declarados idiomas oficiales.

Datos del Censo de 2000 establecen que el 85.4% de la población en la isla habla español, 14.4%, inglés y el 0.2%, otro idioma distinto.