El proceso de traslado a refugios y santuarios de los cientos de animales que vivían en el Zoológico de Mayagüez Dr. Juan A. Rivero y los del Centro de Confinamiento de Especies de Cambalache, en Arecibo, continúa llevándose a cabo, tal como se acordó con las autoridades federales, para atender un sinnúmero de fallas y violaciones que se estuvieron cometiendo por años.

Según explicó la secretaria del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Anaís Rodríguez Vega, tras una reunión de rutina esta semana en La Fortaleza, “esta transferencia de animales es la más grande que se ha dado, sin temor a equivocarme, en el mundo, y se está dando coordinada y en el tiempo que se acordó”.

Detalló que “ya comenzó el traslado de las especies más grandes. Ya (la chimpancé) Mara fue trasladada y ya llegó a su nuevo hogar. La respuesta, o el ‘feedback’ que hemos recibido es que de inmediato fue bien acogida, comió y ya se está acostumbrando. Está en un periodo de cuarentena para entonces ser integrada junto con los demás chimpancés que están en ese espacio”.

De igual manera, indicó, “ya han sido trasladadas otras especies como culebras, aves. Esperamos entonces que ya empecemos con los leones, y así sucesivamente hasta llegar a (la elefanta) Mundi”.

“Hay algunos que van a estar en el Parque de las Ciencias (en Bayamón), especies como por ejemplo las culebras y ese tipo de animales, están pasando al Parque de las Ciencias, que cuenta con los permisos federales, y especies que hemos encontrado santuarios específicos para ellas pues están saliendo de la Isla”, dijo la secretaria.

Recordó que “el acuerdo fue que, a partir de su firma, iba a estar continuando por seis meses, y estamos en calendario y vamos a dar cumplimiento con el mismo”.

Respecto al futuro del área donde estuvo el zoológico, la secretaria recordó que se dio “uno de los pasos para poder darle, valga la redundancia, paso al proyecto futuro, que es un ecoparque. Un parque para el disfrute de cada uno de nosotros, pero que contempla el disfrute y la conservación de ese terreno. Es lo que ya habíamos presentado el mismo día que presentamos el acuerdo, que presentamos lo que va a ser el futuro del espacio”.

En cuanto a la elefanta Mundi, que se destacó por ser uno de los animales más llamativos y queridos del zoológico, la secretaria explicó que, como ha ocurrido con otras especies, personal médico veterinario “tanto del zoológico como el que ha venido del santuario” ha estado preparando a los animales “para que se vaya acostumbrando a lo que va a ser el espacio donde va a ser transportada, el lugar donde va a ser transportada, y así sucesivamente para que tenga un viaje lo menos estresada posible. Que se acostumbre a ese espacio restringido donde va a estar siendo transportada durante horas”.

“Básicamente, por eso se vislumbró todas las posibilidades de transporte. El transporte por medio de embarcación es uno que pudiera durar días, y es por eso entonces que se decidió por lo que menos tiempo era, que es un método aéreo. Esto no es nuevo, se ha hecho en ocasiones anteriores”, comentó.

Agregó que Mundi “no va a ser dormida completa” para ese viaje, aunque “va a haber algún tipo de medicamento que se le va a suministrar, pero esos detalles todavía le están poniendo los puntos finales”.

Recordó que, aunque hay otros animales de gran tamaño, como un rinoceronte y algunos hipopótamos, “la logística más grande por su transportación es la de Mundi”.

La secretaria indicó que por ahora se mantiene el plan de que “Mundi va para (un santuario en) Georgia”, donde ya hay dos elefantes, “y el personal médico veterinario ha identificado que otro de los elefantes que está en ese santuario pudiera ser recordado por Mundi porque en algún momento compartieron”.

“Mundi es rescatada de un circo, y este otro elefante que está en ese mismo santuario, hubo un tiempo que también estuvo en ese circo. Y eso, el dicho que dicen memoria de elefante, pues no va en vano, sino que, científicamente, pudiera reconocerlo”, explicó.

En cuanto a los felinos, también se mantiene en pie la propuesta para trasladarlos a un santuario en el estado de Colorado.

En cambio, para el rinoceronte y los hipopótamos, “estamos tratando de identificar el santuario donde van a estar localizados. Por ahora estamos todavía en la logística de ello, y no puedo un nombre concreto porque todavía no lo tengo”.

Comoquiera, reiteró que “todos (los animales) van a salir. Y ha habido buena recepción por parte de los ‘partners’ (socios) a los que pueden estar yendo las especies”.

Como parte del acuerdo, se deben relocalizar más de 600 animales, unos 340 que estaban en el zoológico y los otros en el Centro de Confinamiento de Especies de Cambalache.

Por último, en cuanto a aquellos animales que de manera natural habían convertido el espacio del zoológico en su hábitat, permanente o migratorio, la secretaria auguró que “eso continuará así, y se vislumbra que con el nuevo proyecto pues haya aún más, que vengan silvestres. Hay mucha ave que llegó silvestre y seguirán allí, porque vamos a dedicar los terrenos a conservación”.