Aumenta riesgo de colapso del radiotelescopio de Arecibo
Otro de los cables que sostiene la estructura se rompió, se cree que por el peso que ha tenido que aguantar desde que en agosto se quebró el primero.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Tres compañías de ingeniería advirtieron de un mayor riesgo de un colapso del estratégico Observatorio de Arecibo, en el norte de Puerto Rico y que alberga el radiotelescopio plenamente operativo más grande del mundo, después de que se rompiera otro cable que sujeta la estructura.
En un comunicado, la Universidad Central de la Florida (UCF), administradora del observatorio, indicó este sábado que también se han observado otras roturas en dos de los cables principales restantes, que soportan una carga de 900 toneladas.
“Cada uno de los cables restantes de la estructura ahora soporta más peso que antes, lo que aumenta la probabilidad de otro fallo de cable y resultaría en el colapso de toda la estructura”, indican en el comunicado.
Las tres firmas de ingeniería contratadas y que se encuentran evaluando los daños son Thornton Tomasetti, WSP y WJE (Wiss, Janney y Elstner Associates).
Las mismas trabajan desde que se rompió un primer cable auxiliar, el pasado 10 de agosto, pero desde que ocurrió el segundo incidente el 6 de noviembre han estado trabajando “día y noche”.
Un equipo de monitoreo ha estado observando de cerca todos los cables y la plataforma, y se están utilizando drones y cámaras remotas para minimizar el riesgo, recalcó la UCF.
El análisis preliminar indica que el cable principal que falló el 6 de noviembre pasado “debería haber manejado fácilmente la carga adicional según la capacidad de diseño”.
Los ingenieros sospechan “que es probable que el segundo cable haya fallado porque se ha degradado con el tiempo y ha estado soportando una carga adicional desde agosto”, subrayó la UCF.
Las empresas de ingeniería no pueden verificar en este momento la integridad de los otros cables que soportan la plataforma de 900 toneladas debido a la inestabilidad de la estructura.
La Fundación Nacional de Ciencias (NSF) de EE.UU es la propietaria de la instalación, que ha sido notificada sobre los problemas mientras las evaluaciones continúan.
El Observatorio de Arecibo cuenta con uno de los radiotelescopios de un solo plato más grandes del mundo.
Se construyó en 1963 con fondos del Departamento de Defensa estadounidense aprovechando su cercanía al ecuador y que el espacio geográfico donde se levantó, rodeado de montañas, protege su inmenso plato reflector de los huracanes.
Producto de una iniciativa de la Universidad Cornell de Nueva York para estudiar la ionosfera, el observatorio tiene un inmenso radar que emite ondas que son rebotadas por los cuerpos astronómicos.