PONCE. “Ho, ho, ho…. ¡Llegó Santa Clós!”. El brillo reflejado en los ojos de sus hijos al ver a Papa Noel entrar a su casa para llevarles los regalos de Navidad, fue la motivación de Wanda Maldonado Medina para abrazar la tradición de recibir –sin fallar- la visita del personaje.

Durante los primeros años de crianza de los niños de la casa, Papa Noel arribó en diversos vehículos; entre estos, bicicleta, carrito de golf y hasta la unidad del correo postal, para sembrar alegrías y crear memorias mientras iban creciendo. Así, el secreto pasó de una familia hasta cautivar a cientos de residentes en la zona sur de Puerto Rico.

No obstante, el empeño de construir un trineo hizo que Wanda, sin pretenderlo, expandiera la magia de un proyecto personal para llevar felicidad a grandes y chicos en diversas comunidades, instituciones sin fines de lucro y fiestas privadas que ya esperan la impactante llegada del santa ponceño.

Ya van casi 30 años de este dulce sueño donde no tan solo llega el señor Clós sino que lo acompaña Mama Clós, los duendes y un equipo integrado por la familia Echevarría Maldonado que incluye a aquellos niños para quienes el proyecto fue inspirado.

“La realidad no estaba viendo esto para llevarlo a muchas partes sino tenerlo para nosotros. Empezamos haciendo algo bien sencillo para la familia, entre los sobrinos, amistades, familiares y allegados y hace aproximadamente ocho o nueve años que un día se me viene a la mente, ‘quiero preparar un trineo’. Cuando preparamos el trineo, ya se convirtió en algo más porque no es tan solo Santa Clós sino que es la música y ahí se unen muchas familias y amistades, duendes”, recordó Wanda.

“Esperábamos que fuera algo familiar y, de momento, como a los tres años, empezaron las instituciones y empresas privadas a llamar. Pero la realidad es que no lo hicimos de primera intención. Honestamente no esperaba la acogida que hemos tenido no tan solo de Ponce sino de otros pueblos del sur como Juana Díaz, Villalba, Yauco, Adjuntas… siempre tratamos de cuando salimos de una actividad, dar la vuelta por el pueblo, las comunidades”, expuso.

Papa Noel arriba a las comunidades en su trineo acompañado de Mama Clós y varios duendes.
Papa Noel arriba a las comunidades en su trineo acompañado de Mama Clós y varios duendes. (Jorge A Ramirez Portela)

Mientras que su hijo, Luis Ángel Echevarría Maldonado -quien ahora tiene 32 años- resaltó la emoción de esperar a Santa cada Nochebuena junto con su hermano y todos sus primos.

“Cuando mami comenzó con esto yo era bien pequeño y todos los 24 (de diciembre) estábamos reunidos esperando el momento en que Santa llegara. Todos los años, mami trataba de que Santa llegara en un carruaje diferente... Nunca faltaba que ese 25 por la mañana recibiéramos los regalos y tener ese momento bonito con la familia”, confesó.

De esa manera, idearon acompañar a Santa Clós en una ruta que inicia antes de Acción de Gracias y culmina el día de Navidad.

“El sentimiento en todos los lugares es distinto. Se siente esta ilusión, ese momento especial. Tenemos una página que se llama ‘De ruta con Santa’, y ahí mucha gente nos pregunta por dónde van. No soy duende, pero muchas veces me he tenido que trepar en la carroza para ayudar a Santa”, agregó la creadora del concepto navideño.

Para Santa, visitar las comunidades de la zona sur luego de los embates de la naturaleza ha sido una experiencia fuerte, pero a la vez, transformadora.

“En una ocasión, visitamos el sector Raíces en el Real Anón en Ponce donde había unos niños en una casa que estaba en la parte baja del terreno, subieron una cuesta y gritaron: ‘Santa, el río nos llevó el cuarto con los juguetes’. Me dieron un abrazo, eran tres niños. Andábamos ese sábado repartiendo juguetes a las 3:00 de la tarde bajo el sol, a pie porque el huracán destrozó todo y limitó los accesos a ese sector”, expuso el señor Clós.

Pero el COVID-19 cambió la forma en que Santa reparte sus regalos y saluda a todo aquel que se le acerca.

“La Nochebuena es una misión especial que comienza a las 6:00 de la tarde a repartir juguetes, pero se han hecho ajustes por el COVID-19. Antes, era más prolongado, este año somos más concentrado, tomando las precauciones con nuestro personal también. Pero es increíble la ilusión de ver los niños que Santa Clós le lleve sus regalos”, apuntó.

Finalmente, tanto la familia Echevarría Maldonado como el santa ponceño, explicaron que lo importante es dejar a un lado las preocupaciones y compartir con los suyos en una fecha especial.

“Jamás dejen caer la ilusión navideña y que siempre, por más negativo que haya sido un año, por más pruebas fuertes, no se puede perder la fe de que habrá un mejor mañana”, concluyó Wanda.