Desde que estaba en el vientre de su madre, Alennys Muñiz Castro desarrolló una condición llamada gastrosquisis, la cual impidió que su cavidad abdominal cerrara por completo, exponiendo sus órganos y requiriendo de varias intervenciones médicas desde sus primeras horas de vida. Esta condición estuvo controlada durante años, pero en septiembre del 2022 la joven de ahora 17 años, quien cursa Asistente de Oficinas Médicas en el undécimo grado de la Escuela Vocacional Antonio Luchetti de Arecibo, volvió a confrontar serios problemas de salud que la llevaron a ser hospitalizada, lo que ha trastocado su vida.

“Alennys nació con los intestinos fuera de su barriga, su condición es gastrosquisis y el mismo día que nace la operaron y a los cinco días tuvieron que volverla a intervenir. Luego, no tuvo más problemas, solo seguimientos. Pero el año pasado, en septiembre, empezó con vómitos, dolor de barriga y cuando la traigo a sala de emergencias y ahí le hacen estudios y salió con obstrucción intestinal”, explicó Nomara Castro, madre de la menor.

Desde entonces, Muñiz está recluida en la unidad de cuidados intensivos del Puerto Rico Woman and Children’s Hospital en Bayamón, donde ha tenido que ser intervenida quirúrgicamente en cuatro ocasiones para intentar estabilizar su condición y permitirle alimentarse.

“Le han hecho cuatro operaciones, la última fue el lunes 30 de enero. El propósito todo el tiempo ha sido alimentarla, nunca han podido alimentarla, porque han seguido saliendo obstrucciones. Ahora mismo es alimentada por sueros y el problema es que después de la primera operación le han seguido saliendo más obstrucciones”, detalló la madre.

Nomara sostiene que los médicos no encuentran ninguna otra manera de ayudar a Alennys, por lo que le recomendaron un traslado a un hospital especializado en trasplante y rehabilitación intestinal en los Estados Unidos.

“La idea de llevarla a Estados Unidos a un hospital de Pittsburg, Pensilvania, es porque ya los médicos no encuentran qué más hacer. El problema que hay es que ella lleva cuatro meses siendo alimentada por suero y puede empezar a tener problemas con el hígado. Por eso hay que tratarlo lo más antes posible”, señaló Castro, quien ya ha comenzado gestiones con el hospital de Pensilvania.

“La comunicación comenzó con el hospital de Pittsburg, ahora ellos van a empezar a reunirse con los médicos, empezar a ver si hay que hacerle otro estudio. Todo está en lo que decidan los doctores. Ya están trabajando en el caso”, dijo la madre.

Una vez el hospital le dé el visto bueno, Alennys deberá ser transportada en ambulancia aérea hacia la nación norteamericana, lo cual implica unos altos costos para la familia arecibeña, que también tiene otras tres hijas.

La familia no cuenta con los recursos para todos los gastos que requerirá la movilización y tratamiento de Alennys, ya que Castro no trabaja, pues cuida de la menor y el único ingreso es el del padre.

“Ha sido bien difícil, somos una familia bien unida, estamos en Bayamón… somos de Arecibo. Mi esposo cuando sale del trabajo tiene que llegar a donde nosotras y tenemos los gastos económicos, la comida, la gasolina, los peajes y nosotros tenemos otras tres niñas, dos mayores que ella una menor de 15 años. Estamos solicitando ayuda económica porque, según me explican la ambulancia aérea tiene un costo bien grande. Entiendo que el plan médico costea una parte, pero nosotros tenemos que costear la otra parte. Tampoco sabemos con qué nos vamos a encontrar allá, nunca hemos ido y vamos a necesitar costear los gastos de hospedaje, comida, y gastos tratamiento médico de Alennys”, dijo Castro.

Quienes deseen aportar económicamente para el tratamiento médico de Alennys, pueden hacerlo a través de ATH Móvil al número de teléfono 787-309-2223 a nombre de Nomara Castro.