El Colegio de Químicos de Puerto Rico (CQPR) advirtió del riesgo existente en las comunidades cercanas al depósito de cenizas de carbón, ya que hay toda una tabla periódica de sustancias tóxicas y cancerígenas en estos desechos, tales como el plomo, molibdeno, arsénico, cromo y mercurio.

Su denuncia surge a base del informe presentado en 2018 por la empresa Applied Energy Systems (AES) en el cual admitió que contaminó el acuífero aledaño a la carbonera en Guayama. 

Los profesionales de la química analizaron el documento durante su Convención de Primavera efectuada el pasado viernes, 15 de marzo en un hotel de Ponce, donde señalaron que el depósito de cenizas sobre el terreno contaminará el acuífero del sur.

“Tenemos una preocupación grande porque al ser tóxicas y haber sido depositadas en varias áreas midiendo los resultados de AES en los acuíferos del Sur, nos preocupa grandemente que en esas áreas donde depositaron cenizas, también ocurra la situación de que impacte los acuíferos del sur que son la única fuente de agua que tiene la ciudadanía”, admitió el ingeniero Juan Santiago Olivares, presidente del CQPR. 

“Está en riesgo la salud de la población en los alrededores de la planta porque básicamente con los resultados que la misma AES demuestra y presenta de que están impactados esos acuíferos”, agregó Santiago Olivares.

De acuerdo con los datos provistos en el evento, las cenizas contienen sustancias tóxicas y cancerígenas tales como el plomo, molibdeno, arsénico, cromo y mercurio; hasta 20 veces más que el carbón en su estado original.

“Las cenizas son la fuente principal de trasladar radioactividad en el ambiente, más que las prácticas militares que hay en los países que tienen esas actividades, literalmente toda una tabla periódica de sustancias tóxicas y cancerígenas”, expresó el doctor en química Osvaldo Rosario López. 

“Una de las ironías grandes es que, estando estas sustancias malas en el carbón, las concentramos más al quemar el carbón, eliminamos la materia orgánica porque la orgánica es la que quema mucho del carbón, del hidrógeno, y al eliminar esa materia orgánica queda concentrado ese veneno. Dependiendo de la quema pueden ser hasta 20 veces más concentrados de lo que era en el carbón original”, sostuvo Rosario durante su disertación. 

Por esa razón, el Colegio de Químicos continuará su investigación mediante el adiestramiento a residentes de diversas comunidades para que ayuden con el muestreo de aguas subterráneas y pozos en sus respectivas zonas. 

También realizarán un estudio ambiental de aire en las zonas circundantes al vertedero EC Waste de Peñuelas. 

“Hay un muestreo de aire por unos olores en el área de Peñuelas que han arrojado que hay evidencia de metales pesados en esos muestreos y podríamos decir que es efecto de las cenizas. Se está haciendo la planificación para continuar los muestreos en esos cuerpos de agua en esa región”, aclaró el presidente de los químicos.

“Como somos científicos debemos tener la data completa para poder justificar estas aseveraciones que estamos haciendo y lo haremos próximamente”, sostuvo Santiago Olivares.

En cuanto a la situación actual de las cenizas, el Colegio resumió que “aparentemente AES está enviando las cenizas fuera de Puerto Rico, según dicen los vecinos”.

“Sería inmoral tirárselas a otros si las generamos aquí. Mientras tanto, sigue la montaña de cenizas en predios de AES, siguen sobre terrenos del sur cerca de dos millones de toneladas y siguen percolando tóxicos hacia el acuífero”, lamentó el doctor Rosario. 

AES asegura cumple con estándares de protección

Por su parte, la empresa AES catalogó de errónea la información difundida en cuanto a los resultados del programa de monitoreo de aguas subterráneas publicados en su reporte de 2018.

“De los 15 constituyentes de monitoreo de evaluación, los resultados muestran niveles por encima de los estándares de protección de aguas subterráneas en tres de ellos: selenio, litio y molibdeno. Todos los demás cumplen con los estándares de protección de agua subterránea. AES-PR se encuentra actualmente implementando el programa de monitoreo de evaluación”, explicó la empresa en comunicado de prensa.

“Se ha reportado de manera incorrecta que AES-PR también tiene excedentes en boro y sulfatos bajo la Regla de RCC. Cabe aclarar, estos constituyentes son solo usados para compararlos con niveles de fondo para determinar si monitoreos adicionales, conocidos como monitoreos de evaluación, son requeridos”, agregó.

No obstante, la empresa aseguró que desarrollará un plan para “implementar acciones correctivas para traer estos tres constituyentes a los niveles que cumplan con los estándares aplicables.

De otra parte, AES mencionó que “es importante recalcar que los resultados de muestras de los pozos de monitoreo al borde de la instalación no son representativos de las aguas subterráneas de otras localidades”.

“AES-PR, bajo el liderazgo de expertos líderes en temas ambientales de Haley & Aldrich, Inc., condujo un estudio separado e independiente basado en información científica disponible, el cual concluyó que no existe impacto en el agua potable. Tampoco se encontró evidencia de impacto en la salud humana o en el medio ambiente”, apuntó.