Los aguaceros registrados durante el fin de semana en la cuenca del embalse Carraízo, en Trujillo Alto, aunque no produjeron acumulaciones de agua significativas, alejaron la amenaza de que el período de racionamiento se extienda más de 24 horas.

Así lo informó este domingo Roberto W. Martínez Toledo, director ejecutivo de la Región Metropolitana de Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), quien indicó que el embalse de Carraízo permanece en un nivel de control, con 36.53 metros de agua registrados este domingo.

“Ha sido positivo (la actividad de lluvia), sin duda, en el sentido de que nos puede ayudar a prolongar el período de racionamiento de 24 horas porque han subido los niveles unos 17 centímetros”, manifestó el funcionario en entrevista con este medio.

“Eso no es mucho, pero nos da unos días adicionales como para mantener la interrupción de 24 horas. Esta semana, se llevará a cabo una reunión, en algún momento, en la que discutiremos hasta dónde podemos llegar”, abundó.

Martínez Toledo no quiso estimar cuándo podrían extender el período de racionamiento para los pueblos de San Juan, Carolina, Trujillo Alto y Canóvanas, que se suplen de Carraízo.

Resaltó que, desde que se implementó el plan de racionamiento el miércoles, se redujo a la mitad la velocidad en que estaba bajando el nivel de ese embalse.

Sequía

El director ejecutivo de la Región Metropolitana de la AAA dijo que, a medida que el nivel se acerque a los 33 metros, hay que controlar aún más la extracción de agua. 

Comentó que el embalse recibe entre 30 millones y 35 millones de galones de agua al día, y que se extraen entre 50 millones y 55 millones de galones. 

“Si el embalse continúa descendiendo, tenemos que dejar de extraer esos 50 millones a 55 millones, y que la extracción sea igual que la entrada. De esa manera, logramos controlar que el embalse siga bajando. Es ahí que tenemos que establecer un racionamiento más agresivo”, expresó.

Sobre el embalse de La Plata, en Toa Alta, Martínez Toledo dijo que tiene un nivel de 43.50 metros, por lo que se mantiene en estado de observación, sin que exista la necesidad inmediata de implantar un plan de racionamiento. 

“Estamos mirando día a día. A pesar de que tiene niveles razonables, está descendiendo con relativa rapidez”, resaltó.

Señaló que han hecho ajustes operacionales, como reducir la presión del agua y controlar la extracción del líquido para evitar llegar al extremo del racionamiento.

Martínez Toledo exhortó a la ciudadanía a ejercer precaución en el uso del agua, incluso a quienes se les suspende el servicio cada 24 horas.

“Aunque tenemos 24 horas sin agua, los que están dentro del plan, cuando el agua les llegue, no se extralimiten en el recogido del agua en los envases porque eso afecta la forma de recuperación, sobre todo para las partes altas”, puntualizó.