Agonizan los vertederos en el suroeste
En uno a tres años la Isla podría quedarse sin vertederos luego que el huracán María acortara su vida útil al generar más de 12 millones de yardas cúbicas de residuos y estorbos.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
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Puerto Rico está contra el reloj, pues podría quedarse sin vertederos en el plazo de uno a tres años.
Esto porque el huracán María acortó la vida útil de estos sistemas al generar más de 12 millones de yardas cúbicas de residuos y estorbos.
La situación apretó el botón del pánico de las autoridades locales y federales ya que, de 28 vertederos, solo 11 están en cumplimiento con los reglamentos de ambas jurisprudencias.
De acuerdo con Carmen Guerrero Pérez, directora de la División del Caribe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), “el huracán terminó generando más de dos veces y eso tuvo un impacto en la vida útil de los vertederos”.
“Puerto Rico perdió cerca de dos años de capacidad de los vertederos por todos los escombros que generó el huracán y a la misma vez de proyección hacia el futuro, nos quedan entre uno a tres años de vida de los vertederos como están cada uno. Para darte un ejemplo, Puerto Rico genera anualmente entre 4 a 5 millones de yardas cúbicas y el huracán generó 12 millones”, apuntó Guerrero Pérez.
“En cualquier otra jurisdicción esto es una crisis y para muchos no es una crisis porque no la vemos. Es bien fácil, porque a nosotros nos recogen la basura todos los días en nuestras casas y se la llevan y ese problema desaparece. Es un reto bien grande que tienen los municipios a través de toda la isla porque la mayoría de los vertederos que quedan disponibles están en el sur o el este de Puerto Rico”, destacó.
Según la directora de la EPA en Puerto Rico y el Caribe, los sistemas de relleno sanitario que están actualmente en cumplimiento son: Toa Baja, Vega Baja, Cabo Rojo, Carolina, Fajardo, El Coquí en Humacao, Hormigueros, Peñuelas Ecosystems y el Peñuelas Valley Landfill, Ponce y Salinas.
“Estos 11 se consideran sistemas de relleno sanitario porque tienen revestimiento sintético o ‘liner’, entre otros requisitos. Así los diferenciamos de los 17 vertederos que no tienen liner, no monitorean la calidad del agua subterránea, no manejan sus lixiviados y no ponen cubierta diaria, entre otros requisitos”, explicó.
Ante la situación, Guerrero sostuvo que “es un problema grande que tienen que confrontar los municipios y sabemos que la situación fiscal de los municipios en la mayoría es bien difícil por la situación fiscal que hay en el país”.
“Muchos de esos vertederos poco a poco van a ir cerrando, así que esto es un problema de gasto de transportación, de personal, de equipo, que tienen que llevar los desperdicios sólidos a lugares más lejanos en sistema de relleno sanitario que están en cumplimiento”, afirmó.
Mas no se trata de extender los sistemas de relleno sanitario actuales sino de implementar estrategias que ayuden en el manejo de desperdicios sólidos y a la vez, que se conviertan en nuevas fuentes de ingreso para el país.
“Es bien importante decir que podemos resolver el problema de que nos queda poca capacidad, de uno a tres años, con aumentar las celdas, pero de aquí a cinco o diez años nos vamos a ver en el mismo problema porque no hemos identificado otras maneras de manejar nuestros desperdicios sólidos”, expresó la directora de la EPA en Puerto Rico y el Caribe.
“Hay que buscar estrategias integradas para el manejo de estos residuos sólidos en Puerto Rico, no solo verlo como algo individual municipal, sino verlo como Isla, cómo vamos a trabajar el futuro del manejo de desperdicios sólidos en la isla y es desafortunado, porque aquí hay una gran oportunidad de desarrollo de empleos y económico porque el residuo sólido no es basura, no es un desperdicio, es un bien que tiene algún valor si lo empezamos a mercadear y buscamos mercados a nivel local o internacional”, resaltó.
De otra parte, Guerrero Pérez urgió al desarrollo de programas de reciclaje a través de los municipios, que, a su vez, fomenten el surgimiento de nuevas industrias y empresas municipales.
“Todo ese plástico, todo ese vidrio, todo ese aluminio, el papel, todo tiene mercados de reciclaje o podemos ayudar a crear una economía de industrias de reciclaje en la isla. Así que hay es que le vemos el gran valor y si la única alternativa es abrir más vertederos y más sistemas de relleno sanitario este problema lo vamos a confrontar de nuevo dentro de cinco a diez años”, argumentó.
“Hay varios municipios que han logrado altos niveles de reciclaje, puedo resaltar el municipio de Comerío, Carolina, Bayamón, entre otros. ¿Qué es lo que hacen? El municipio facilita el proceso de reciclaje y a la misma vez buscan los distintos mercados y a la misma vez crean industrias ya sean empresas municipales para poder entonces buscarle un mercado a esos materiales”, señaló.
La directora de la EPA en el Caribe participó de varios talleres dirigidos a funcionarios municipales de la zona sur en las instalaciones de la Pontificia Universidad Católica de Ponce, con el propósito de identificar estrategias y fondos para el manejo adecuado de los desperdicios sólidos en sus respectivos pueblos.