En días en que las filas son la orden del día, el municipio de Cataño sumó una más a la agenda de sus residentes, la de recoger alimentos y agua en el centro de ayuda que se habilitó cerca del área de la Villa Pesquera.

En un esfuerzo de la administración municipal con la colaboración de la primera dama, este es uno de los 36 espacios que están siendo creados para dar ayuda a los ciudadanos luego del paso del huracán María por la Isla.

Christopher Morales, del residencial Juana Matos, señala que solo tuvo que esperar unos 15 minutos en la fila designada para los vehículos. 

“Salí a buscar comida, me encontré con la fila y decidí hacerla porque no consigo agua en ningún lado”, aseguró Morales quien recibió seis botellas de agua de 16 onzas cada una, alimentos enlatados y una bolsa de comida compacta de la que consumen los militares.

Igual suerte corrió Wanda Otero, quien llegó hasta el área con sus hijas para recibir ayuda. Las tres son residentes en el barrio Palma, uno de los muchos lugares castigados por los fuertes vientos y las lluvias del huracán María. 

“El barrio está destruido y a estas alturas se nos está acabando la comida y los supermercados no tienen nada. Tampoco hay ATH y no hay efectivo”, dijo la mujer.

Por su parte, Sara Allende llegó con un grupo de vecinos del barrio Palma a buscar sus alimentos. Ella perdió el techo de parte de su casa y, al igual que la mayoría de los puertorriqueños, no cuenta con los servicios de agua y luz, pero se mostró agradecida por la ayuda recibida y por “estar viva”.

El alcalde de Cataño, Félix Delgado, explicó que se trata de una iniciativa de la administración municipal que recibió la ayuda de la Oficina de la Primera Dama y de las empresas ubicadas en la zona industrial del pueblo.

“Estamos hoy y mañana y estaremos viernes y sábado cada semana hasta que todo vuelva a la normalidad. Tenemos agua, ‘snacks’, comida enlatada, comida del Army y ahora nos trajeron un vagón de lechuga. De todo lo que nos traiga nuestra buena gente de la zona industrial. Ayer entregamos frutas frías y yogur”, comentó.

El alcalde añadió que ya está identificando las áreas más afectadas, como el sector Juana Matos, para trasladar hasta allá el centro de ayuda, de manera que pueda impactar a una mayor cantidad de personas.

“Tan pronto nos estabilicemos, ayudaremos a Toa Baja”, añadió.

Esfuerzo para ayudar a otros

Por otra parte, Cataño también cuenta con un centro de acopio que se mantiene recibiendo donaciones de la población para ayudar a los damnificados por el huracán Irma.

El centro de acopio está ubicado tiene dos áreas de despacho, una es en Centro de Diagnóstico y Tratamiento de Cataño, que opera las 24 horas del día, y otra es el centro de gobierno, que opera entre 9:00 a.m. y 4:00 p.m., de lunes a viernes.

En el CDT un grupo de empleados de Desarrollo cooperativo y de la Corporación pública para la supervisión y seguro de cooperativas en Puerto Rico (COSSEC), se dedica a clasificando toda la mercancía que llega al centro de acopio del municipio de acuerdo al sexo, las tallas y las edades de quienes pueden beneficiarse de ellos.

La mercancía que llega al centro de acopio se distribuye primeramente entre los más de 200 refugiados que todavía quedan en el municipio. Luego se llevará a los damnificados por el huracán en los diferentes sectores del pueblo.

Las personas que deseen donar ropa, artículos de primera necesidad y comida (tanto para adultos e infantes como para animales) pueden llevarlos al centro de acopio ubicado en el CDT de Cataño a cualquier hora, al centro de gobierno entre 9:00 a.m. y 4:00 p.m. o por correo al Municipio de Cataño P.O. Box 428, Cataño, Puerto Rico 00963.

Además, la empresa Bacardí ha habilitado un área para que los refugiados del municipio puedan ser llevados durante el día.

“Es un refugio diurno donde las personas son llevadas de 11:00 a.m. a 4:00 p.m. y allí tienen actividades recreativas, almuerzo y meriendas”, añadió Roxanna Sifre, primera dama de Cataño.