El motivo del crimen de una afamada profesional del negocio de bienes raíces, quien estuvo desaparecida desde el miércoles por la noche y cuyo cadáver fue localizado el jueves en el barrio Dajaos, en Bayamón, se desconocía hasta anoche y ayer las autoridades entrevistaban a un conocido de la víctima, con quien fue vista por última vez.

Brendalí Sierra Ramos tenía tan sólo 38 años, era propietaria de la empresa Brendalí Sierra & Associates y vivía en la exclusiva urbanización Mountain View, en Lomas del Sol en Guaynabo. Tenía una vida fructífera por delante, pero le arrebataron la vida.

Fue hallada con un impacto de bala, con entrada por la parte posterior de la cabeza y con salida por la frente, según confirmó la autopsia realizada ayer por la patóloga Rosa Rodríguez.

La mujer fue vista por última vez acompañada por un hombre, que en la actualidad no mantenía una relación sentimental con ella.

Ha trascendido que Sierra Ramos estaba separada de su ex pareja y había comenzado a relacionarse con otra persona.

A pesar de que la ex presidenta del Instituto de Tasadores de Puerto Rico fue reportada desaparecida por su familia, la información no fue divulgada, como es común que se dé en la busca de ayuda de la ciudadanía para encontrarla.

No fue hasta el jueves, a eso de las 6:00 de la mañana, que su guagua BMW fue localizada a orillas de la carretera #812 por policías municipales de Bayamón. Nueve horas después, su cuerpo fue encontrado a 80 pies de distancia del vehículo en un barranco del sector rural.

La pesquisa criminal que lleva a cabo la División de Homicidios de Bayamón sobre el asesinato de la mujer, quien es hermana de la fiscal de Carolina Yadira Sierra Ramos, ha establecido que el robo ha sido descartado porque el asesino no le hurtó la guagua, su reloj lujoso ni otras pertenencias.

El secretario de Justicia, Guillermo Somoza Colombani, negó ayer que las autoridades federales hayan tomado jurisdicción del caso del asesinato de Sierra Ramos.

Desde el jueves, personal del FBI estuvo presente en la escena del crimen ante la sospecha inicial de que la muerte hubiese sido en medio de un carjacking.

El titular de Justicia insistió en que el caso lo están investigando varios fiscales del Departamento de Justicia en conjunto con la Policía. El personal del FBI lo que hace es colaborar con las autoridades estatales, dijo.

Se aclaró, además, que la víctima no había denunciado ningún fraude en el campo en el que laboraba ni tampoco era testigo de alguna pesquisa a esos fines.

Somoza Colombani confirmó que Sierra Ramos no fue arrastrada al lugar donde se halló su cadáver, lo que apunta a que pudiera haber sido ejecutada allí mismo.

Sobre la fiscal de Carolina, hermana de la víctima, el secretario de Justicia dijo que desconocía si ésta había sido amenazada alguna vez. Sí confirmó que trabaja con casos criminales sensitivos como los de asesinato y narcotráfico.

Ayer, los investigadores forenses levantaron evidencia del vehículo de la víctima.