Todavía en la búsqueda del sospechoso de asesinato en negocio de Orocovis
Desde que se produjo el crimen, a eso de las 7:25 p.m., no se sabe nada del individuo, encargado de preparar los tragos en el negocio.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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La Policía continua buscando a un empleado del negocio La Divisoria, ubicado entre Orocovis y Villalba, quien ha sido señalado por varios testigos como responsable de una balacera que el domingo en la noche dejo el saldo de una persona muerta y otra herida.
Desde que se produjo el crimen, a eso de las 7:25 p.m., no se sabe nada del individuo, encargado de preparar los tragos en el negocio. El hombre ni siquiera se ha comunicado telefónicamente con sus parientes y ningún representante legal se ha acercado a las autoridades.
El incidente ocurrió en el local ubicado en la carretera PR-143, intersección con la PR-149,
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Según la Policía, Jonathan Vargas Figueroa, de 25 años, llegó al negocio junto a dos hermanos y tres amigos, luego de que el grupo fue expulsado de otro comercio.
Policía busca a "bartender" del negocio donde ocurrió asesinato en Orocovis
La Policía supo que Vargas Figueroa tenía una vieja rencilla con el “bartender” del negocio ubicado en la intersección de las carreteras PR-143 y PR-149. Entonces, por razones que aún no están claras, supuestamente el empleado abrió fuego contra su cliente rival, quien fue declarado muerto en una clínica de Villalba.
La balacera también dejó herido a un hombre identificado como Gerardo Padilla, quien llegó al Hospital San Lucas, en Ponce, donde fue atendido.
Este medio supo que vídeos de cámaras de seguridad en el negocio ya fueron ocupados por las autoridades y serían examinados entre hoy, martes, y mañana, miércoles, para determinar qué pasó, si grabaron imágenes al momento de los hechos.
Mientras, ya se han entrevistado a sobre 10 personas, entre allegados del herido y de la víctima mortal, entre otras personas.
Se supo que el tiroteo es la tercera tragedia que ocurre en ese establecimiento, cuyo antiguo dueño, Edwin Domínguez Morales, fue muerto de un balazo en el pecho en medio de un asalto. Domínguez Morales le había comprado el local a otro hombre, cuyo hijo fue asesinado en el negocio.