Tía de Rosimar: “Va a pagar por el crimen que cometió”
Familia de la joven asesinada nunca había visto al acusado por su secuestro y asesinato.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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“Él está tras las rejas y va a pagar por el crimen que cometió”.
Así lo expresó Marangelí Gómez Ortiz, tía de Rosimar Rodríguez Gómez, de 20 años, cuyo secuestro y crimen fue esclarecido hoy con la radicación de cargos al presunto autor de los trágicos sucesos. La mujer expresó que enfrenta aferrada a su fe el doloroso proceso de vivir convencida de que se hará justicia para su sobrina tanto en el plano terrenal, así como en el celestial.
Sobre el imputado indicó que no era conocido de su familia, que jamás lo habían visto y sobrecogida por el dolor no pudo dirigirle un mensaje ante el atroz crimen que los dejó con el alma rota.
La jueza Lorraine M. Biaggi Trigo, del Tribunal de Primera Instancia de Bayamón, determinó hoy causa para arresto por los delitos de asesinato, secuestro, violación a los artículos de la Ley de Armas y por ofrecer información falsa sobre un delito contra Jay O’Neill González Mercado, de 20 años, como presunto autor del crimen señalándole una fianza de $2,140,000 la cual no prestó, por lo que fue encarcelado.
Gómez Ortiz sostuvo que el arresto de González Mercado le dio un poco de sosiego, al saber que está tras las rejas por el asesinato de su sobrina. Al preguntarle si en este momento hay perdón en su corazón para el joven acusado -y las otras personas que podrían haber estado involucradas en el asesinato- respondió que: "yo no soy quién para juzgar a nadie, aquí el único que va a juzgar todo esto va a ser Jehová. De verdad, en este momento estoy tranquila porque una persona está tras las rejas por esto”.
Durante una entrevista con Primera Hora la tía agradeció al Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) así como a la Fiscalía de Bayamón por su labor incansable para lograr el esclarecimiento del caso, al pueblo de Puerto Rico y a los medios de comunicación por unirse en un frente común.
“Ellos continúan trabajando con el caso de mi sobrina y estamos agradecidos con todo el pueblo de Puerto Rico, con todos los medios de comunicación porque se han desbordado, de verdad que sí. Muchas oraciones, muchas palabras de aliento... de verdad que estamos demasiado de agradecidos. No se nos va a devolver a mi sobrina, esto es una pesadilla para todos nosotros, pero se está haciendo justicia y eso es lo importante”, expresó al perder el aliento.
Asimismo, confió en que no solo se haga justicia en el caso de su sobrina, sino con todos los que están sin esclarecer de otras mujeres cuyos familiares sufren sus pérdidas, los cuales salieron a la luz pública luego del secuestro de la joven.
El sufrimiento por el vacío dejado por Rosimar lo sobrellevan viviendo día a día, porque “esto nos cambió a nosotros la vida por completo”.
Rosimar fue secuestrada frente a su residencia del barrio Sabana Seca, en Toa Baja, el pasado 17 de septiembre a las 9:22 p.m. Ese día permanecerá en sus recuerdos como el más feliz y en solo horas el de más extrema angustia, ya que antes de la desaparición estuvieron celebrando en familia el cumpleaños de su abuelo materno.
“Ese es el último recuerdo que tenemos de ella y la recordamos con tanto amor, porque ella estaba contenta, bien feliz, la pasamos bien lindo, era el cumpleaños de papá, sus 73 años. Ese fue ese día que pasamos con ella, de felicidad pasamos a un dolor, de verdad todavía yo lo pienso y digo: ‘wow, esto no es nada fácil’”, contó Gómez Ortiz.
Durante la tarde del 27 de septiembre, una de las personas de interés que fue entrevistado con relación a los sucesos condujo a los agentes de la División de Homicidios de Bayamón hasta el kilómetro 20.1 de la carretera PR-165 en Dorado donde en un pastizal, a unos 100 a 150 pies de la orilla de la carretera, encontraron su cadáver en avanzado estado de descomposición.