Sospechoso de violaciones podría declararse culpable a nivel federal por carjacking
En el foro estatal, se espera por pruebas forenses para poder someterle cargos por las violaciones, según se indicó.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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El licenciado Héctor Ramos Vega, de la Oficina del Defensor Público federal, radicó una moción para solicitar que se paute una vista de cambio de alegación de culpabilidad en el caso de su representado, pero solamente sobre parte de los delitos que enfrenta Cruz Rivera. En otra moción, el letrado pidió la desestimación de los tres cargos relacionados a la portación de un arma de fuego.
"El acusado Cruz Rivera solicita a la corte que se paute la vista para hacer cambio de alegación de no culpable a culpable en los cargos uno, tres y seis del pliego acusatorio enmendado. Él insistirá en su derecho a ir a juicio en cuanto a los demás cargos", lee el escrito sometido por Ramos Vega.
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El juicio contra Cruz Rivera está pautado para comenzar el 13 de octubre ante el juez federal José A. Fusté.
En los cargos que pidió que sean desestimados, el abogado planteó que "fallan en calificar como crimen de violencia y deben de ser desestimados". Dichos cargos alegan que Cruz Rivera usó, portó y desenfundó un arma de fuego durante y en relación a la comisión de un crimen violento, que sería el robo de un vehículo de motor a mano armada.
"El gobierno no puede probar estos cargos porque el carjacking categóricamente no cualifica como un crimen de violencia", opinó Ramos Vega, quien citó casos en los que se indica que el delito de carjacking es uno de "intimidación", que no requiere "fuerza física violenta", según argumentó.
El 15 de septiembre pasado, un gran jurado federal emitió un pliego acusatorio enmendado contra Cruz Rivera al agregar cargos por un tercer carjacking que se alega cometió entre el 18 y 19 de julio pasado, en el que robó un automóvil Honda Fit del 2009 a una fémina y por portar un arma durante la comisión del delito de violencia.
No se ofrecieron más detalles sobre ese incidente.
Originalmente, enfrentaba dos cargos de carjacking por hechos reportados el 30 de junio y el 11 de julio pasado, dos cargos por portar arma mientras cometía los actos y un cargo por poseer un arma, siendo un convicto con historial criminal.
De ser encontrado culpable, el hombre, señalado también como sospechoso de cometer al menos cuatro violaciones en Santurce, El Condado e Isla Verde, se expone a una pena máxima de 25 años de cárcel por el carjacking, y de cinco años hasta cadena perpetua por los cargos relacionados con el uso de armas. Por poseer un arma siendo convicto, se enfrenta a no más de 10 años de prisión, según las leyes federales.
Cruz Rivera fue arrestado por las autoridades estatales el 21 de julio, y al día siguiente el Negociado de Investigaciones Federales (FBI) asumió su custodia. Desde entonces permanece en el Centro de Detención Metropolitano (MDC, por sus siglas en inglés), en Guaynabo, porque antes de la presentación de los nuevos cargos en su contra fue detenido por violar las condiciones de la libertad supervisada.
El primer carjacking por el que se le acusó ocurrió el 30 de junio pasado, a eso de las 9:30 p.m., cuando se alega que asaltó a una mujer que llegaba a su casa en Santurce y la llevó a un cajero automático en Isla Verde para despojarla de dinero. A raíz de esos hechos, la Policía obtuvo un vídeo de las cámaras de seguridad del cajero y eventualmente fue identificado y arrestado.
El otro carjacking que se le imputa ocurrió el 11 de julio a las 11:00 p.m. en Santurce. En este caso, las autoridades indicaron que una mujer, identificada como víctima #2, se detuvo en una gasolinera en la esquina de las calles San Jorge y Loíza, donde Cruz Rivera se le acercó y le anunció que se trataba de un asalto, y le apuntó con una pistola negra. Le indicó que quitara los seguros del carro y se montó en el asiento del pasajero. Fue entonces que le instruyó a guiar hasta el mismo banco en Isla Verde al que fue con la víctima #1, precisa la acusación.
Cuando los policías estatales arrestaron a Cruz Rivera, ocuparon una pistola Glock 22 calibre .40 y tres cargadores en el apartamento donde vivía en el residencial Luis Lloréns Torres.
Ambas víctimas lo identificaron positivamente en una rueda de confrontación en el Cuartel General de la Policía.
En el foro estatal, se espera por pruebas forenses para poder someterle cargos por las violaciones, según se indicó.
Cruz Rivera tiene convicciones previas por delitos graves y menos graves a nivel estatal, como escalamiento, robo y fuga, que se remontan al año 1993.