Sigue subiendo la nube de humo del fuego forestal de Gurabo
Esta mañana el fuego no afecta la visibilidad para los conductores que transitan por las autopistas PR-30 y PR-52, bautizada como Luis A. Ferré.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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La humareda que se genera en el incendio forestal que ha consumido 1,000 cuerdas de terreno entre Caguas y Gurabo se ha intensificado en la mañana de este viernes, lo que afecta la visibilidad para los conductores que transitan por las autopistas PR-30 y la Luis A. Ferré (PR-52), confirmó la portavoz del Cuerpo de Bomberos, Paola Figueroa.
Señaló que también tienen reportes de residentes de la zona de que el efecto del humo se siente “más fuerte que ayer”.
No obstante, indicó que el incendio se mantiene contenido y que no ha vuelto a reactivarse.
Asimismo, informó que a las 9:00 a.m. salió un helicóptero de la Guardia Nacional, en el que se encontraba el jefe del Cuerpo de Bomberos, Ángel Crespo, para hacer labor de reconocimiento y evaluar los daños provocados por el fuego forestal más grande que se ha reportado en Puerto Rico.
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Más temprano, Crespo dijo a este diario que hay dos focos de incendios ubicados en lugares inaccesibles que lo mantenían preocupado, pues reconoció que pudieran provocar que se reactive nuevamente.
“Hay que ver cómo el calor del día y la fuerza de la dirección de viento nos afecta en los focos de incendio”, precisó en entrevista con este medio.
El fuego se desató en la tarde del miércoles. Al culminar ese día, solo se habían quemado 200 cuerdas de la Estación Experimental Agrícola de la Universidad de Puerto Rico (UPR), así como fincas cercanas a la Academia de la Policía y colindantes a la urbanización Paseo de Santa Barbara, en Gurabo.
Ayer, sin embargo, el fuego se reactivó. El saldo fue “el fuego forestal más grande que se ha reportado en el País”. Se quemaron 1,000 cuerdas de terreno que se extienden desde la Academia de la Policía, en Gurabo, hasta el negocio Caguas Expressway Motor, en la Ciudad Criolla.
“Nunca nos habíamos enfrentado a un fuego de esta magnitud”, expuso el funcionario, al manifestar que fue exitosa la operación aérea que realizaron con la Guardia Nacional para rociar la zona afectada con agua extraída desde el río Gurabo.
“Lo controlamos. Estamos satisfecho con la operación que montamos. Pudimos poner en control a un fuego que era enorme”, añadió Crespo.
Este viernes será el tercer día que bomberos, personal de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Aemead), vecinos de Gurabo y voluntarios se lanzan al campo a combatir el incendio.
Crespo detalló que un horas de la madrugada un teniente y un oficial recorrieron las áreas donde todavía quedan los focos de incendios para hacer un “reconocimiento y ver la extensión de estos focos”. Dijo que luego se desarrollaría la operación para “terminar la extinción completa del fuego”.
Añadió que “no se ha tomado la determinación de operar con helicópteros de la Guardia Nacional (en la extinción del incendio). Hay que poder ver durante el día, con el comportamiento del fuego, qué se puede lograr”.
El problema de los focos de incendio que quedan, tras el largo combate realizado en vísperas, es que son en lugares inaccesibles para camiones y que no pudieran cumplir con los parámetros de seguridad para que se opere en el área con los helicópteros, relató el jefe de Bomberos.
Por otro lado, Crespo informó que durante la noche no fue necesario establecer más planes de desalojo en la comunidad de Santa Barbara, la más afectada por las llamas.
“La exhortación es que si padece de asma, se movilicen de manera voluntaria para que no les afecte el humo”, sostuvo.
La zona afectada por este fuego forestal está clasificada por el Monitor de Sequía de los Estados Unidos en sequía extrema.
Las lluvias que se registraron anoche y en la madrugada en la Isla, provocadas por una baja presión y una onda que pasó por la zona, no han llegado al área afectada por el fuego, dijo Crespo.
Lo que sí ha provocado este incendio es que se utilicen miles de galones de agua potable, cuando más de 400,000 abonados de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados en la mitad este de la Isla están bajo planes de racionamiento.
Ayer, por ejemplo, Crespo informó que se utilizaron 6,000 galones de agua. El miércoles, según dijo, se utilizaron mucho más. No obstante, no precisó la cantidad.
Para evitar el uso de agua potable, el Cuerpo de Bomberos ubicó en el barrio Jaguas, sector El Puente, unas máquinas de extracción de agua cruda del río Gurabo. Esa agua fue la que utilizó la Guardia Nacional para lanzarla desde los helicópteros. Crespo sostuvo que “eso fue la asertivo de ayer” en el combate del fuego.