El comienzo del segundo día del juicio contra el productor Raphy Pina Nieves se concentró en el desglose de múltiples municiones de distintos calibres ocupados en una residencia del acusado en Caguas.

Un agente del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), Todd Gaines, había comenzado a declarar ayer, indicando que estuvo a cargo del allanamiento en la casa de la urbanización Caguas Real, el 1 de abril de 2020.

Ayer dijo que dos pistolas y municiones fueron ocupadas en un cuarto oculto, con puerta de metal y un panel numérico en dicha residencia.

Su testimonio de hoy más bien se basó en validar la evidencia física de las municiones ocupadas.

Además de presentar balas, también autenticó al menos ocho cajas de balas mostradas al jurado.

Cabe mencionar que en los argumentos iniciales, ayer, la fiscal María Montañez indicó que durante el juicio mostrarán evidencia de que una caja de municiones tenía una huella dactilar de Pina Nieves.

Todavía no se ha identificado en cuál de las cajas está la huella dactilar. Sí se observó en sala que el licenciado Francisco Rebollo, uno de los abogados de la defensa, presentó una objeción por “cadena de custodia” a uno de los exhibits que consistía en cajas de municiones.

Por su parte, el agente federal identificó cientos de balas - en cajas o dentro de cargadores - de calibres: 9mm, .25, .40, .45, 5.27mm, 7.62mm, 7.90mm, .380 ACP.

Añadió que un cargador con una bala 9mm fue encontrado en un armario de uno de los cuartos.

Entre otras pertenencias ocupadas, el agente identificó una tableta iPad con una cubierta que tiene el nombre del acusado.

Asimismo, fotos de dos libros de cheques del Banco Popular y First Bank, respectivamente, fueron mostrados al jurado y validados por el agente. El libro del Banco Popular tenía el nombre del acusado, mientras que el otro leía “Los Magníficos”.

Fotos de otros artículos con el nombre de Pina Nieves fueron mostrados, como una tarjeta de membresía, un certificado y un trofeo en el que lo felicitan como “principal promotor” (“top promoter”).

Antes del receso para almuerzo, la fiscalía también mostró una imagen en la que se ve una foto de Pina Nieves con familiares que estaba en la casa durante el allanamiento.

El Ministerio Público parece enfatizar en estos artículos para demostrarle al jurado que la propiedad y los artículos en el interior le pertenecen a Pina Nieves, aunque él no estuviera presente el día del allanamiento.

La fiscalía federal busca convencer al jurado de que Pina Nieves tenía “posesión constructiva” de las armas de fuego. Eso quiere decir que tenía “control” de estas, lo que tiene prohibido como condición de convicto federal, tras declararse culpable por fraude bancario en el 2015.

Pina Nieves enfrenta dos cargos por posesión de un arma de fuego modificada ilegalmente para disparar de forma automática y por posesión de un arma de fuego por parte de una persona que fue convicta por un delito federal.

Por cada cargo se expone a un máximo de 10 años de prisión.