Se reportan dos asesinatos en la madrugada de este jueves
Policía investiga los hechos.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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Las autoridades no descartan el robo como posible móvil del crimen de Onofre Soto Ongay, de 76 años, un vecino muy apreciado en la comunidad Villa Marisol, en Toa Baja.
Soto Ongay fue ultimado a tiros esta madrugada frente a su residencia, cuando se presume que salía a recoger cartones para procurar su reciclaje.
El hombre presentaba varios impactos de bala en la cabeza y el rostro. Al conocerse el crimen residentes del área, así como el alcalde toabajeño, Aníbal Vega Borges, lamentaron el asesinato.
El comandante Rafael Rosa Córdova, director del Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) del área de Bayamón, indicó que la víctima salía todos los días de su casa a eso de las 4:30 a.m. para recoger cartón y papel para reciclaje en varias compañías en Toa Baja.
A pesar de que el septuagenario tenía dinero en su ropa y prendas, se teoriza que el motivo del crimen pudo haber sido el robo en medio de un forcejeo con su atacante.
“Era bien servicial, una buena persona, todos los días salía a recoger cartón y papel en varios comercios, en eso ha trabajado toda la vida”, destacó Rosa Córdova.
En la residencia había cámaras de seguridad y sus grabaciones serán examinadas por los investigadores en busca de indagar si se captaron las imágenes del asesinato, añadió el comandante.
De otro lado, el Cuerpo de Investigación Criminal del área de Carolina investiga el asesinato de un hombre frente a su residencia en la urbanización Villa Carolina. El cadáver de la víctima presentaba 15 impactos de bala.
Fernando de Jesús Díaz, de 26 años, alias Beato, fue transportado gravemente herido por familiares hasta el Hospital Dr. Federico Trilla, de la Universidad de Puerto Rico, en Carolina.
El paciente fue referido al Centro Médico de Río Piedras, pasada la medianoche, pero falleció en el trayecto a esa instalación.
El comandante Jesús Rivera, jefe del CIC de Carolina, indicó que todavía los investigadores no han establecido el motivo del crimen.
En la escena del asesinato se ocuparon como evidencia 24 casquillos calibre .40.