Pedradas, tubazos, insultos, amenazas y otras  conductas violentas han sido reportadas con la llegada a la Isla de Uber.

Al menos así  opina Wilfredo Carrasquillo, un cliente de Uber que el martes en la noche pasó el susto de su vida mientras viajaba como pasajero en un auto conducido por un  conductor de Uber y, de manera sorpresiva, fue acorralado por varios taxistas enojados.

“Primero le tiraron con algo al carro. Luego nos detuvieron y abrieron las puertas del carro y nos querían sacar, incluyendo al chofer de Uber... era una manada de taxistas furiosos. Me zafé como pude porque les caí a patadas para poder cerrar la puerta”, recuerda el hombre que también es conocido como el Dj Wolves Can Riot,   quien grabó durante nueve minutos el altercado.

El filme fue editado a dos minutos y lo colgó en la página  que lo identifica como artista en Facebook porque, según dice, es importante denunciar públicamente lo ocurrido.

“Eso pudo haber terminado en una tragedia porque estoy casi seguro que alguno de ellos (los atacantes) estaba armado. Lo peor es que la policía municipal de San Juan prácticamente no hizo nada y nos faltó el respeto al chofer de Uber, a mi y a mi chica, que éramos las víctimas de esos salvajes... hasta registraron el auto del chofer de forma ilegal”, agregó Carrasquillo quien  consultaba los hechos con un abogado con la intención de recurrir a una acción legal.

Una historia similar vivió el  publicista Javier Bellido, quien viajaba desde su trabajo (cerca del Hotel Caribe Hilton) con un conductor de Uber, cuando fueron atacados a “peñonazos” por unas personas que, alega, son taxistas en esa área y se oponían a que recibiera el servicio.

“Esa gente nos estaba velando... funcionan como mafia con walkie talkie y todo... realmente fue un momento de mucha tensión y me parece injusto lo que sucedió. Ellos no pueden controlar quién quiere coger Uber y quién no. Por esas mismas actitudes es que el pueblo no los apoya”, dijo quien se disponía a radicar una querella en la Policía.

Bellido también documentó lo ocurrido y lo compartió en Facebook con una serie de fotografías que muestran el golpe que recibió el auto de su chofer , un muchacho identificado como Zuriel, y quien no quiere hablar públicamente pues se siente bien nervioso tras el incidente.

Otro ciudadano que quedó atónito con los eventos ocurridos fue Billy  Blanco, quien tuvo que llamar al servicio de emergencias 9-1-1  cuando fue testigo del momento en el que un taxista “acorraló” a un conductor de Uber que le daba servicio a unos turistas  cerca del Hotel Marriott.

“Trabajo en un proyecto de construcción y vi cómo los taxistas velan  a  la gente y cuando identifican que es chofer de Uber le bloquean el auto, no lo dejan continuar la marcha y forman un revolú que puede terminar muy mal”, expresó el hombre quien temió por la seguridad de los extranjeros.

“Bendito, tú tenías que ver la cara de esos cuatro turistas que iban sentados en el carro. Menos mal que la Policía llegó y lidió  con la situación. Pero de todos modos, mira la imagen que se lleva esa gente de Puerto Rico”, lamentó.

Mientras, Julie Robinson, Gerente de Comunicaciones de Uber en Centro América y Caribe  dijo por escrito que   “estos actos de violencia son sumamente perjudiciales y deben ser rechazados”. 

“Agradecemos a Grace Santana, secretaria de la Gobernación, por su declaración en contra de estas situaciones y esperamos que las autoridades intervengan inmediatamente para prevenir estos actos de violencia en el futuro”, agregó.

Aclaró, además, que en este tipo de situación, Uber tiene a su disposición  un número de emergencias para que los socios conductores puedan alertar a la compañía. Dependiendo el acontecimiento se toman las medidas necesitarías.