El confinado José A. Concepción Guerra, alias “Matojo”, fue excarcelado hoy para la radicación de un cargo de asesinato por la muerte de Eliezer Omar Encarnación Alicea, de 13 años, ocurrida el 17 de diciembre en el patio de una casa, en la calle Coco Plumoso, en la urbanización Bosque de Palmas, en Bayamón.

Concepción Guerra fue conducido por las autoridades a la Sala de Investigaciones de Bayamón, donde el  fiscal Sergio Rubio y el agente José A. Pérez Caldero presentaron los cargos de asesinato y violación a la Ley de Armas ante  la juez Rafael Villafañe.

La juez   determinó causa para arresto e impuso una fianza de $3 millones. El imputado fue reingresado a la cárcel Regional de Guayama.

En la residencia, donde hallaron varios altares de santería, se ocuparon dos silenciadores de rifles, cuatro cargadores tipo tambor de rifle AK-47, un peine y 24 cajas de balas calibre .45, el mismo utilizado para matar al niño.

También, incautaron 27 bolsas plásticas tipo “combo” que estaban surtidas con 25 bolsitas de heroína, cocaína y crack, para un total de 675 sobrecitos; una piedra de crack, picadura de marihuana, 360 bolsitas de heroína y dos bolsas plásticas que contenían 76 bolsitas de cocaína, en la residencia. 
Estos individuos trabajaban al mando del ex prófugo “Ángelo Millones.

A las 10:00 a.m. habrá una conferencia de prensa del secretario de Justicia, Guillermo Somoza Colombani, el superintendente de la Policía, José Figueroa Sancha, y el subsecretario de Corrección, Jesús González, para anunciar el esclarecimiento de este crimen.

 

Reaccionan padres de menor asesinado

Los padres del menor agradecieron a las autoridades el esclarecimiento del crimen de su hijo, aunque esperarán  que culmine el proceso para expresar con certeza que se hizo justicia terrenal.

La madre del menor, Migdalia Alicea, manifestó entre lágrimas que confía tanto en la justicia terrenal como la Divina.

“Confío en la justicia de la tierra más confío en la justicia Divina, que es sobretodo la más importante…No ha sido fácil, perder un hijo es un dolor bien grande, yo a mi hijo lo lloro todos los días, me hace mucha falta, porque Eliezer era un nene bueno”, declaró entre lágrimas.

El padre del menor, Cirilo Encarnación Kuilan, aseguró que en ningún momento ni él ni los residentes de la urbanización con acceso controlado se percataron de que en la residencia ocupada por “Matojo” se llevaban a cabo actos ilícitos.

“Todavía estamos en espera. Hay presunción de inocencia. Hay que esperar el proceso. Yo confío en el sistema, hay que esperar que el sistema funcione, es el único que tenemos. No es perfecto, pero hay que confiar en él”, declaró el padre.