El Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) lanzó una campaña este mes para orientar a las personas que son violadas en un avión o un crucero.

La campaña establece, a modo de pregunta: “¿A quién recurren las víctimas de agresión sexual en un avión o en un crucero?”

Estos delitos comúnmente ocurren en espacios en los que no se puede definir su jurisdicción. Sin embargo, el FBI responde que cuenta “con herramientas de investigación avanzadas, recolección de pruebas y apoyo a las víctimas”, por lo que se puede acudir a la agencia federal para hacer la denuncia.

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Se aseguró que, acudiendo a la agencia, se puede lograr “justicia y responsabilizar a los agresores”.

Esta campaña no solo ha sido lanzada por el FBI en San Juan. Varias oficinas en ciudades como Nueva York y Sacramento han compartido también en sus redes sociales esta información como parte del “Mes de Concienciación sobre el abuso sexual”.

Datos encontrados en la página cibernética del FBI expone que, al menos, en el 2023 se atendieron 96 casos de personas violadas en un avión.

“Típicamente, los hombres son los perpetradores y las víctimas son mujeres o menores que viajan solos”, se alertó.

Para los pasajeros de avión, el FBI recomienda tomar las siguientes medidas. Estas incluyen estar pendientes a ciertas señales.

“Los agresores suelen poner a prueba a sus víctimas, a veces fingiendo rozarlas para ver cómo reaccionan o si se despiertan. Si ocurre este comportamiento, establezca límites y considere pedir que lo cambien de asiento. Si su compañero de asiento es un desconocido, por muy educado que parezca, mantenga el reposabrazos abajo. Si está organizando que un niño vuele sin acompañante, intente reservar un asiento de pasillo para que los auxiliares de vuelo puedan vigilarlo más de cerca. Los menores son blancos conocidos. Si ocurre un incidente, repórtelo inmediatamente a la tripulación del vuelo y solicite que registren la identidad del atacante y lo reporten. Ellos pueden alertar a las fuerzas del orden, si es necesario”, se indicó.

Mientras, en cruceros se registraron unos 180 casos, que van desde robos hasta personas desaparecidas. Pero, los casos principales son violaciones sexuales.

“Los pasajeros pueden ayudar a protegerse manteniéndose alerta, estando atentos a su entorno, asegurando sus pertenencias e informando rápidamente cualquier actividad o incidente sospechoso a la seguridad del barco”, indicó el FBI.