El juez José Caballero López, del Tribunal de Fajardo, emitió hoy, jueves, una sentencia de cuatro años en probatoria para un gruero que se había declarado culpable por intentar removerle a su hija de 15 años un tatuaje utilizando una pulidora.

Juan Rivera García, de 42 años, hizo admisión de culpabilidad mediante un acuerdo en el que la Fiscalía se comprometió a reclasificar los delitos que pesaban en su contra por el incidente registrado con la menor, quien se tatuó la piel sin el consentimiento de su progenitor. 

El individuo, que se encontraba en la libre comunidad luego de prestar una fianza diferida de $60,000, tendrá que cumplir con un programa de reeducación, según se estipuló en el acuerdo. 

Contra el gruero se presentaron cargos de restricción a la libertad y cargos de maltrato, pero los mismos fueron reclasificados a menos grave, lo que le permitirá a Rivera García cumplir su pena en probatoria.

Por otro lado, un padre que fue acusado de maltrato de menores, por pegarle a su hija de siete años en hechos que se registraron el pasado 30 de junio de 2014, fue sentenciado hoy, jueves, a una probatoria de tres años por la jueza Heidi Kiess Rivera, del Centro Judicial de Arecibo.

El convicto, identificado como Orlando Estrella Miranda, de 27 años, fue detenido por supuestamente castigar severamente a la menor, aunque las autoridades no dieron a conocer más detalles sobre los métodos que utilizaba el ciudadano para regañar a su hija. 

Según información provista por la Administración de Tribunales, la jueza ordenó la remoción de un grillete que utilizaba el individuo, luego de prestar una fianza diferida mediante de la Oficina de Servicios con Antelación al Jucio (OSAJ).

Un informe de la Policía que fue dado a conocer luego del arresto de Estrella Miranda apuntaba a que la víctima estaba bajo la supervisión del Departamento de la Familia.