El Negociado de la Policía activó hoy el mecanismo de la Alerta Rosa por la desaparición de Yarelis Santiago Martínez, de 25 años, quien fue vista a eso de las 5:30 p.m. del martes abordando una guagua Suzuki Vitara, color Blanca, frente al edificio 6 del residencial El Trébol, en Río Piedras y se desconoce su paradero.

La mujer, que es vecina de ese complejo de vivienda pública, fue descrita por su progenitora como de tez trigueña 5′6″ de estatura, 290 libras de peso, pelo corto negro, ojos marrones y vestía una blusa sin mangas color rojo con un dibujo de un corazón gris en el centro, pantalón largo azul y tenis negros.

Posee varios tatuajes los cuales no fueron descritos, entre ellos uno en el hombro izquierdo a colores y otro en el lado derecho del abdomen.

Como seña particular tiene una cicatriz en el lado derecho del labio superior por la mordida de un perro.

Está vigente hasta el 2 de mayo una orden de protección ex parte que había solicitado Santiago Martínez, no obstante, las autoridades no descartan ningún ángulo en esta etapa de la pesquisa.

Si la ha visto, llame a la línea confidencial del Negociado de la Policía al (787) 343-2020, al cuartel más cercano o al 9-1-1. También puede llamar al teléfono (787) 793-1234 extensiones 2463 y 2464.

La Alerta Rosa es una herramienta que ayuda a la pronta localización de féminas de 18 años o más que se encuentren en riesgo inminente de sufrir daño por motivo de un secuestro o cualquier circunstancia donde se presuma la comisión de algún delito ocurrido relacionado a la desaparición.

Por su parte, el comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa, indicó que se puso en vigor la alerta como mecanismo de apoyo a la búsqueda iniciada ayer, miércoles, ya que durante el transcurso de la investigación surgió información adicional que llevó a los agentes de la División de Personas Desaparecidas del CIC de San Juan.

Este es un recurso adicional que tiene el objetivo de solicitar la ayuda ciudadana en la búsqueda de una mujer adulta, cuando los investigadores entienden que es necesario para apoyar el proceso de investigación. Una alerta no sustituye la investigación, iniciada desde el momento en que se reporta la desaparición, ni las búsquedas presenciales por parte de equipos especializados y voluntarios de la comunidad.

Independientemente de su activación, López Figueroa, organizó un grupo especial de investigación conformado por agentes de diferentes divisiones para que puedan recopilar, compartir información y emplear múltiples herramientas para agilizar la pesquisa, cuya labor apoya con datos a los grupos que realizan las búsquedas presenciales.