Horas después de que el gerente de seguridad del Municipio de Carolina,  Juan Ortiz Crespo supuestamente agrediera sexualmente a una empleada, investigadores forenses ocuparon en su oficina un paño azul con varios dibujos hechos a mano con tinta, que incluían penes.

Así trascendió hoy en la continuación del juicio en su contra por el delito menos grave de acoso sexual laboral que se lleva a cabo en el Centro Judicial de Carolina.

El investigador forense Alex Cintrón Castellanos quien labora en el Instituto de Ciencias Forenses (ICF), testificó que el paño azul estaba en el escritorio del funcionario.

"Eran dibujos extraños y desagradables... uno era de un árbol de Navidad pero que en la parte de arriba en vez de lo normal era la cabeza de un pene", dijo el investigador forense.

Otro dibujo lo describió como de un muñequito y uno de sus brazos era un pene. Al pasar la luz ultravioleta encima de ese paño, se pudo ver la presencia de fluidos, aunque Castro Castellanos aclaró a preguntas del abogado de Ortiz Crespo -Michael Corona- que a simple vista no podía determinar qué tipo de fluido era, ni desde cuándo estaba en el paño.

Otra pieza de evidencia que se levantó en la escena fue una camiseta blanca con el mensaje Primer lazo de esperanza por pacientes de cáncer. La camiseta tenía manchas amarillentas y un pelo que se envió a análisis.

"Al pasar la luz ultravioleta (por la camiseta) se creó mucha luminiscencia", dijo el investigador.

Asimismo se ocupó otro paño similar a los que se usan para limpiar espejuelos y se levantaron muestras de una mancha cerca del lugar donde la empleada municipal asegura que fue violada.

La jueza Berthaida Seijo quien preside la sala vio además 19 fotos de la oficina de Ortiz Crespo y dónde estaban ubicados los escritorios de las secretarias, así como una ventana de acrílico,  que no obstante, estaba tapada con una cortina.

El otro testigo del día fue Jesús Zambrana, abogado del municipio,  quien afirmó que la alegada víctima enfrentaba un proceso de posible destitución porque alegadamente alteró un certificado médico "para obtener un beneficio que no le correspondía".

La vista administrativa en contra de la empleada nunca se llevó a cabo porque la mujer, que entonces tenía 23 años, renunció a su trabajo.

Los hechos en este caso se remontan al 31 de octubre de 2013 cuando la empleada fue a la oficina de Ortiz Crespo para discutir su posible destitución por el certificado médico.  En la oficina del gerente de seguridad supuestamente el hombre la violó. 

La defensa de Ortiz Crespo niega los hechos y dice que se trató de un intento de entrampamiento.