El convicto Pablo Casellas Toro regresa hoy al Tribunal de Bayamón para la vista de lectura de sentencia, luego que un jurado lo encontró culpable del asesinato de su esposa Carmen Paredes Cintrón.

Por primera vez, el hijo del juez federal Salvador Casellas Moreno entrará a la sala 706 esposado y vestido con el uniforme de confinado para escuchar al juez José Ramírez Lluch dictar una pena que podría oscilar entre 99 a 111 años de prisión en una audiencia que se transmitirá en vivo a todo el País.

En una decisión de 11 a 1, un jurado encontró al excorredor de seguros, de 49 años, culpable de un cargo de asesinato, una violación a la Ley de Armas por dispararle a su compañera y un cargo de destrucción de evidencia por disponer de los casquillos y la pistola que utilizó para matarla la mañana del 14 de julio de 2012.

Casellas también enfrenta un cargo menos grave de informar falsamente un delito al reportar a las autoridades que supuestamente sufrió un “carjacking” el 17 de junio de 2012, en el Club Metropolitano de Tiro, de Toa Baja.

Pero ayer en la tarde, los abogados defensores Harry Padilla Martínez, Juan Ramón Acevedo Cruz, Arturo Negrón García y Francisco Rebollo Casalduc radicaron una moción titulada “Escrito reclamando que al dictarse sentencia no procedan agravantes y que son de aplicación las figuras del concurso de disposiciones penales y el concurso real”.

En el documento, los abogados defensores sostienen que Casellas Toro solo puede ser sentenciado a 99 años de prisión.

La defensa argumenta que no existe base jurídica para que el juez Ramírez Lluch dicte sentencia tomando en cuenta agravantes porque durante el juicio el Ministerio Público no radicó circunstancias agravantes en la comisión de los delitos imputados a Casellas Toro.

También sostienen que las normas de derecho penal establecen que en instancias donde coinciden varios delitos se condena por la sentencia mayor.

En este caso, según los letrados, existe concurso de delitos entre los cargos de asesinato, destrucción de evidencia e informar falsamente un delito.

Ofrecen una argumentación parecida en el caso de la infracción a la Ley de Armas, una pena que se duplica y que usualmente se cumple de forma consecutiva a otras penas.

 Concluyen, entonces, que en este caso solo se puede imponer la pena de cárcel de 99 años del cargo de asesinato.

Antes de resolver esta petición, el juez Ramírez Lluch concedió a los fiscales Phoebe Isales Forsythe, Janet Parra Mercado y Sergio Rubio Paredes hasta mañana a las 8:30 a.m. para exponer su posición.

Transmisión en vivo

La vista de lectura de sentencia de Casellas Toro representa un hito histórico en la cobertura de los tribunales porque se permitirá su grabación y transmisión en vivo.

 Amparados en la nueva visión de transparencia y apertura esbozada por el Tribunal Supremo, que inició un programa piloto que permite la grabación y transmisión de algunas vistas civiles en el Tribunal de San Juan, las organizaciones periodísticas realizaron la solicitud al máximo foro judicial.

 Será la segunda ocasión en que se transmite una vista de lectura de sentencia. En diciembre pasado, a petición de los gremios que agrupan a los fotoperiodistas y periodistas, se transmitió la sentencia del convicto exalcalde de Cidra, Ángel “Wiso” Malavé Zayas.

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