Oscar Santamaría es sentenciado a cumplir dos años y medio en prisión
Por pagar sobornos para obtener contratos en varios municipios.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
PUBLICIDAD
El empresario colombiano Oscar Santamaría Torres, quien aceptó haber pagado sobornos a varios alcaldes a cambio de millonarios contratos municipales a favor de sus empresas, fue sentenciado este martes a cumplir dos años y medio (30 meses) de prisión.
También deberá cumplir tres años de libertad supervisada, 150 horas de labor comunitaria, pagar una multa de $100,000 y devolver $6 millones.
El juez presidente del Tribunal federal de Distrito, Raúl Arias Marxauch, impuso la pena, durante una vista en la que estipuló que el “modus operandi” de Santamaría Torres era pagar sobornos para obtener contratos que fueron más allá del municipio de Cataño, que fue el caso por el cual se declaró culpable, y que involucró miles de dólares.
Relacionadas
“Tenía la experiencia y la educación, los medios para ganarse la vida honradamente en Puerto Rico... Pero, esto no fue suficiente para él”, precisó el juez federal, al destacar que Santamaría Torres estudió abogacía y tenía la capacidad para actuar según ordena la ley.
El convicto llegó al Tribunal federal custodiado por dos agentes del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés), así como dos alguaciles. Le acompañó su esposa, Noelia Santos Rodríguez, quien era secretaria del exalcalde de Cidra, Javier Carrasquillo.
Previo a conocer su sentencia, Santamaría Torres indicó lo siguiente: “expreso mi mayor remordimiento”.
“Tomo responsabilidad de las consecuencias por mis actos. La parte más difícil ha sido fallarle a mi familia, que pese a eso me han apoyado. Estoy haciendo cambios para mejorar”, indicó.
Le dijo al juez que sus “decisiones” le trajeron dolor y lo han hecho sentir avergonzado.
“Entiendo que mis acciones no sólo dañaron mi reputación, sino que dañaron las instituciones... Mis compañías, mi bufete, mis amigos se han perdido por mis acciones”, sostuvo.
Afirmó que lo han atacado a él y a su familia sin poder defenderse de los ataques que recibió.
“Yo seguí todas las instrucciones de la Fiscalía federal y mi familia tuvo que mantener silencio... Hoy, tomo mi responsabilidad de mis acciones. Me disculpo por los dolores que haya hecho sentir”, expresó.
“Cooperar ha sido una decisión difícil, por todo el escrutinio público al que me he tenido que someter... Ha sido difícil testificar contra aquellos que me consideraron su amigo. Voy a hacer todo lo que pueda por retomar el respeto que tenía. Voy a llevar una vida íntegra”, añadió.
La esposa de Santamaría Torres también se dirigió al juez.
Santos Rodríguez expuso que “durante los últimos tres años, hemos atravesado como familia un camino de desafíos y dificultades”.
Dijo que el proceso de cooperación con las autoridades federales ha sido “torturante”, porque ha sido un proceso largo y no han podido clarificar las mentiras que se han expresado públicamente en su contra.
“Dios me ha dado la fortaleza para levantarme día a día y transmitir esa fortaleza a mi familia, en especial a mis niños”, afirmó.
“Oscar es el pilar de nuestro hogar. Es un padre trabajador, totalmente presente en la vida de sus seis hijos”, sostuvo, al comentar que el hijo de ambos tiene cuatro años y desconoce todo lo que ocurre.
“Para mi hijo, su papá es todo. Es, literalmente, un superhéroe... No duerme si papá no está en la cama”, le dijo al juez sobre su pequeño.
Destacó que su esposo ha solicitado perdón a todo el que conoce y ofendió, así como que ha demostrado en los pasados tres años su arrepentimiento a través de buenas acciones. Entre otras cosas, la esposa expresó cómo Santamaría Torres ayudó a un adulto mayor a empujar su auto averiado, así como a los problemas que enfrentó la mujer que limpia en su hogar el mismo día en que supo que era investigado por las autoridades federales.
Santamaría Torres se declaró culpable el pasado 30 de noviembre de 2021 de un solo cargo de conspiración, soborno con fondos federales y comisiones ilegales o “kickbacks” en el municipio de Cataño.
Fue uno de los alcaldes a los que le pagaba los sobornos, el de Cataño, Félix “El Cano” Delgado, quien lo delató ante las autoridades federales.
Tanto Delgado como Santamaría colaboraron con las autoridades federales para destapar un esquema corrupto de pago de soborno a cambio de contratos que se extendió por varios municipios y dejó, al menos, una decena de convictos, incluidos alcaldes y varios contratistas.
Piden sentencia de 12 a 18 meses en prisión
La abogada de Santamaría Torres, la exfiscal María Domínguez, así como los fiscales del caso, Nicholas Cannon y Seth Erbe, pidieron al juez federal una sentencia de entre 12 a 18 meses en prisión
Cannon, quien abogó por los 18 meses de cárcel, dejó claro que no hubo evidencia de que “Santamaría u otros contratistas inflaron precios para pagar sobornos” a los alcaldes. Pero, dijo que no se puede cuantificar el dinero perdido bajo estos esquemas.
Aceptó, de paso, que “sin su cooperación todas estas convicciones no hubieran sido posibles”.
Mientras, Domínguez destacó que su cliente cooperó totalmente con todas las investigaciones.
Aunque aceptó que “el cooperador merece ser castigado”, la abogada pidió tomar en cuenta esa “extensa cooperación” que brindó Santamaría Torres en las investigaciones que llevaron a más de una decenas de políticos, asesores y empresarios a ser convictos a la hora de ser sentenciado.
“Se tomó en serio su obligación con el acuerdo. Ha mantenido un perfil bajo pese a las alegaciones que se han discutido públicamente”, dijo, al destacar que los contratos de una de las empresas imputadas para cometer los sobornos, Waste Collection, era la que menos dinero requería del municipio de Cataño en las subastas.
Dijo que su cliente fue abochornado y hasta humillado públicamente por sus delitos. Aludió que él era un empresario y abogado “exitoso” y sus movidas “reprochables” le hicieron perder todo. Sentenció que ahora “quiere contribuir al mundo y su comunidad”.
“Él no viene a la corte a minimizar las decisiones que él tomó... Su conducta contribuyó a mantener un sistema corrupto. Ambas partes violaron la ley”, destacó.
De inmediato, comentó que Santamaría Torres es un gran padre para sus seis hijos.
“Eso es lo más que le duele, las burlas a sus hijos en la escuela, porque llevan su apellido. Lo único que puede hacer es aceptar la responsabilidad”, sostuvo.
La abogada hizo público en su alocusión en la corte que entregó varias cartas a favor de su cliente. Leyó una en la que se informaba que salvó a una familia de una inundación en una carretera.
Posterior a escuchar la sentencia, Domínguez pidió que su cliente fuera recluido en una prisión en Pensacola, en el estado de Florida. Mientras, Santamaría Torres deberá entregarse en o antes del próximo jueves, 2 de mayo a las 2:00 p.m.
Levantó las manos
Al declarse culpable el pasado 30 de noviembre de 2021, Santamaría Torres colaboró para destapar un esquema corrupto que se había extendido a varios municipios. El activismo incluyó grabaciones de la entrega de los sobornos que pagaba.
En el listado de casos destapados por Delgado y Santamaría Torres se destacan los de los exalcaldes de Guaynabo, Ángel Pérez Otero; de Trujillo Alto, José Luis Cruz Cruz; de Guayama, Eduardo Cintrón Suárez; de Humacao, Reinaldo Vargas, así como de Aguas Buenas, Luis Arroyo Chiqués y Javier García Pérez.
También cayeron los empresarios Mario Villegas, Raymond Rodríguez y José Bou.
Todos los mencionados resultaron convictos por participar del esquema de soborno.
Pese a los tentáculos que expandió en este esquema de corrupción, Santamaría Torres sólo aceptó culpa por haber pagado $2,000 semanales en soborno a Delgado a cambio de 54 contratos o modificaciones a los mismos por un monto de $49.3 millones en el municipio de Cataño.
Santamaría Torres llegó a la Isla luego de que fuera adoptado a los 12 años por el esposo de su tía, un yaucano. Se convirtió en abogado e inició en la esfera política como asesor legislativo tanto con populares como novoprogresistas.
El abogado estableció varias empresas en su ascendente carrera rodeado de políticos. La primera fue la empresa de recogido de basura, Waste Collection, en septiembre de 2012.
Incorporó también la empresa de salud, VIP Healthcare Solutions, Inc., en mayo de 2018, así como la constructora Island Builder, en agosto de 2018. Estas tres fueron implicadas por las autoridades federales como las involucradas en el esquema de soborno.
En sus únicas explicaciones públicas sobre las ilegalidades cometidas, ventiladas durante el juicio del convicto exalcalde de Guaynabo, Santamaría Torres reveló que inició en el mundo de los sobornos buscando contratos para su empresa de recogido de basura.
Apuntó a que fue el empresario Rodríguez el primero que le mencionó la oportunidad de obtener un contrato bajo la administración de Arroyo Chiqués si pagaba un soborno de $1 por el recogido de la basura de cada residencia en Aguas Buenas.
“En ese momento, yo estaba bien nervioso”, afirmó Santamaría, al exponer que era la primera vez que tenía que lidiar con prebendas y sobornos. Por ello, decidió pasarle al convicto exalcalde los $10,000 mensuales a través de Rodríguez.
Santamaría Torres rechazó en su testimonio haberle dado sobornos a todos los alcaldes con los que tuvo contrato bajo sus empresas implicadas: Island Builders, Waste Collection y VIP Solution Healthcare. Entre los que sacó de la lista estuvieron Cidra, Naguabo, San Germán, Cabo Rojo, Toa Baja y Loíza.
Durante su testimonio, el colombiano explicó que en una ocasión recibió una llamada de su abogada para que acudiera a una reunión. Dijo que cuando llegó al encuentro, ocurrido el 3 de mayo de 2021, se topó con que había agentes del FBI y tres funcionarios de la Fiscalía federal.
“Me enseñaron fotos. María (Domínguez) me dijo que tenían grabaciones y muchas cosas de transacciones ilegales”, reveló.
Indicó que el consejo de su abogada fue llegar a un acuerdo de culpabilidad. Como parte de ese acuerdo, Santamaría aceptó grabar los momentos en que entregaba sobornos o sostenía conversaciones con los implicados.
Pese a que aceptó haber pagado a varios municipios, como en Trujillo Alto, Humacao, Aguas Buenas y Guaynabo, al final de cuentas sólo se declaró culpable por sus movidas en Cataño.
El alegato de hechos presentado por la Fiscalía federal expone que para obtener contrato para sus compañías de recogido de basura, Waste Collection Corp.; la constructora, Island Builders, así como la de servicios de salud, VIP Healthcare, el colombiano hizo “una larga donación” a las campañas de Delgado. Se aludió que, al menos, pagó $30,000 para su campaña a la alcaldía en el 2012 y que, al menos, dio $40,000 para la campaña eleccionaria del 2016.
Además, se destaca en el expediente criminal de Santamaría Torres que pagó $2,000 semanales a Delgado desde junio de 2017 hasta el 17 de agosto de 2020.
“El acusado Oscar Santamaría Torres a sabiendas e intencionalmente se combinó, conspiró y acordó con otros conocidos y desconocidos para el gobierno para cometer ofensas en contra de Estados Unidos, incluyendo soborno a programas federales, para corruptamente dar, ofrecer y acordar dar cosas de valor al individuo A (Delgado), un oficial público y agente de Cataño, con la intención de influenciar y gratificar al individuo A en conexión con negocios, transacciones y una serie de transacciones en Cataño valoradas en $5,000 o más cuando las oportunidades surgían en contratos municipales”, establece el documento judicial.