El director del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Héctor Pesquera se opuso ayer, por razones presupuestarias y de logística administrativa, a un proyecto de ley que facultaría a los municipios a transferir voluntariamente sus guardias municipales al Negociado de la Policía.

“Teniendo la coyuntura económica que enfrentamos como gobierno no podemos comprometernos a que sean integrados al Negociado de la Policía, aún de manera voluntaria, los cuerpos de las policías municipales que así lo interesen”, sostuvo Pesquera en una ponencia escrita a la Comisión de Seguridad Pública de la Cámara de Representantes.

Indicó que la propia medida dispone que la firma de los acuerdos de integración conllevará el relevo de los municipios del pago del salario y todas las responsabilidades laborales sobre el policía transferido.

Añadió que el presupuesto del Negociado de la Policía está comprometido y que un gran por ciento corresponde al pago de la nómina de sus empleados, tanto del sistema de rango como clasificado.

Mientras, se sometió otro proyecto que enmienda la ley del DSP para establecer, mantener y operar un cementerio estatal de oficiales del orden público. La medida, del representante Nelson del Valle, no consigna de dónde saldría el dinero para el nuevo camposanto.

Indica el proyecto que el director del DSP seleccionará el lugar dónde se establecerá el cementerio y que éste tendrá entre sus obligaciones, solicitar o aceptar dinero, materiales o cualquier clase de ayuda que provean gobiernos municipales, estatales, federales o el sector privado para la operación y mantenimiento del cementerio.

Además de policías, podrán ser sepultados en el lugar, bomberos, forenses, empleados de Manejo de Emergencias, del Cuerpo de Emergencias Médicas, Sistema 9-1-1 y el Negociado de Investigaciones Especiales.