El nuevo juicio contra Pablo J. Casellas Toro, acusado de asesinar a su esposa Carmen Paredes en el 2012, no comenzará en julio, según acordaron las partes hoy en una vista ante la jueza Nerisvel Durán Guzmán del Tribunal de Bayamón.

Tanto el abogado defensor Harry Padilla como las fiscales Phoebe Isales y Janet Parra explicaron a la jueza que resultaría imposible revisar toda la documentación del voluminoso caso y estar listos para la fecha del 15 de julio que se había pautado previamente.

El caso contra Casellas Toro ya tuvo un primer juicio en el 2014, en el que fue encontrado culpable, y sentenciado. Sin embargo, el veredicto del jurado no fue unánime y recientemente el Tribunal Supremo de los Estados Unidos determinó que las condenas en casos de delitos graves tenían que darse con veredictos unánimes. Esa determinación abrió las puertas a que casos todos aquellos casos de condenas con por delitos graves que aun estuvieran en alguna fase de apelación pudieran solicitar nuevo juicio, como sucedió con Casellas Toro.

Según trascendió en la vista, las fiscales explicaron que, en principio, estarían usando las mismas pruebas y testigos del primer juicio.

No obstante, indicaron que aún no han podido contactar a todos los testigos y ver si están disponibles.

“Hasta el momento, la prueba es la misma que teníamos. Hemos adelantado con algunos testigos, pero no con todos. Cuando terminemos, pues estaremos en posición de decir si eliminaremos algunos y si añadiremos otro y habría que hacer descubrimiento de prueba adicional”, explicó Parra ante la jueza.

Por su parte, Padilla indicó que tenía conocimiento de que un testigo que usó en el primer juicio, el doctor Rafael Jiménez Vélez, estaba confrontando problemas de salud y no lo había podido contactar aún para verificar si estaría disponible.

Ante ese panorama la jueza pautó una nueva vista de estatus para la fecha del 15 de julio que se había separado, de manera que ambas partes pudieran revisar todos los documentos y terminar de preparar el caso.

Por el momento, no se fijó una fecha para el comienzo del nuevo juicio.

Entretanto, se espera que Casellas pueda salir de la cárcel de un momento a otro, luego de cumplir con todas las exigencias de la fianza que se le impuso el pasado 28 de mayo. Ese día, la jueza Marta Rosario Santana acogió el reclamo de la defensa y rebajó la fianza del primer proceso, imponiéndole a Casellas Toro una nueva fianza global de $2 millones por los tres cargos que enfrenta, de asesinato en primero grado, destrucción de pruebas y violación a la Ley de Armas. Además, estableció unos requisitos adicionales que debía cumplir, como que contara con tres personas que actuaran como custodios.

Antes de la vista, el abogado Padilla indicó que “ya el tribunal autorizó a la hija de mi cliente a ser el tercer custodio”.

“Estamos trabajando la fianza, y en algún momento, ya sea esta semana o la próxima, se prestará la fianza”, afirmó Padilla.

El abogado también confirmó que el nuevo juicio sería también por jurado.