No causa para arresto en alzada contra policías por muerte de adolescente
Los hechos se remontan al 1 de agosto de 2022.
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El juez Rafael Taboas Dávila determinó esta noche no causa en todos los cargos en la vista de Regla 6 en alzada contra seis policías investigados por la muerte del adolescente Javier Antonio Cordero Nevárez, de 16 años, baleado durante una intervención policíaca el 1 de agosto de 2022, en la urbanización La Riviera, en Puerto Nuevo.
Previo al anuncio de su determinación señaló contradicciones en la prueba presentada por el Ministerio Público en sala y utilizó varias declaraciones juradas de testigos en las que expresa que se escucharon comandos para detenerse, se vio reflejo de luces y sirenas y expuso que sin premeditación no hay asesinato en primer grado, tras manifestar que se trata de un “suceso trágico y lamentable”.
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El 17 de abril, la jueza Iraida Rodríguez, de la Sala de Investigaciones del Tribunal de San Juan, no determinó causa para arresto contra los seis agentes identificados como Giovanny Santiago Avilés, Roseanne Ruiz Cisneros, Félix De Jesús Abreu, Luis Vélez Mari, Kevin Omar Meléndez Monsegur y Paola Frías Santiago.
Al culminar el tercer y último día de vista tras las entrevistas a los últimos testigos a cargo del análisis de la evidencia y al patólogo Carlos Chávez, la fiscal Sonia Martínez Ortiz argumentó que “la prueba demuestra de manera clara e inequívoca que los agentes aquí imputados actuaron con uso excesivo de la fuerza lo cual resultó en la trágica muerte del joven de 16 años Javier Antonio Cordero Nevárez. Este uso excesivo de la fuerza no estuvo justificado y va en contra de los principios fundamentales de justicia y protección de los derechos ciudadanos”.
Subrayó que no se demostró que los agentes estuvieran en ningún peligro inminente.
“61 casquillos de bala disparados contra un joven desarmado, ninguna evidencia de que los agentes estuvieran en ningún peligro inminente y una clara violación a las normas de la Policía de Puerto Rico sobre el uso de fuerza proporcional. Estas acciones socavan la confianza pública en nuestras instituciones y demandan una respuesta firme y justa”.
Por su parte, el licenciado Jorge Gordon Menéndez, puntualizó que los agentes cumplieron con su deber y no hicieron un uso excesivo de la fuerza.
“No ha habido una evidencia adicional que no se haya presentado en etapa de Regla 6. El argumento ahora es que no había razón para no usar la fuerza excesiva. Con mucho respeto le suplico honorable juez que todos en cada uno de los cargos que tienen estos miembros, porque hasta hoy siguen siendo miembros de la Policía, con el sacrificio que eso conlleva, que haga una determinación de no causa”.
Ruiz Cisneros enfrentó cargos por asesinato, poner en riesgo la seguridad u orden público al disparar un arma de fuego (artículo 249 del Código Penal) y violar el artículo 6.14 de la Ley de Armas por Disparar o Apuntar Armas de Fuego.
Santiago Avilés, Vélez Mari y De Jesús Abreu fueron acusados por los delitos de tentativa de asesinato, poner en riesgo la seguridad u orden público al disparar un arma de fuego (artículo 249 del Código Penal) y violar el artículo 6.14 de la Ley de Armas por Disparar o Apuntar Armas de Fuego.
Mientras que Meléndez Monsegur y Farías Santiago por violar los artículos 249 del CP y 6.14 de la Ley de Armas.
De acuerdo con informes preliminares, la persecución comenzó a las 7:00 p.m. cuando agentes de la División de Vehículos Hurtados de Carolina seguían la ruta que tomó una guagua que era rastreada mediante el sistema de “GPS” por su propietario, que mantuvo contacto primero con una agente de la División de Vehículos Hurtados de Carolina y luego con una teniente, desde que se la hurtaron en la urbanización Villa Fontana en Carolina, horas antes. En ese momento el menor estaba con su progenitora.
La guagua Hyundai Tucson de 2016 se movió de los residenciales Vista Hermosa, en Puerto Nuevo, al Luis Llorens Torres, en Santurce y retornó a Vista Hermosa. Luego salió.
Cuando llegó a la intersección de las calles 40 SO y 15 SO de la urbanización La Riviera, en Puerto Nuevo, que no tenía salida, entonces dio retroceso y chocó con la verja, un buzón y otro vehículo al subirse a la acera, a pesar de que habían tres patrullas de la Policía.
La versión inicial que surgió de NPPR es que el conductor intentó atropellarlos y al verse acorralado le dispararon.
El primer día de vista testificó Sheila Nevárez Chiclana, progenitora del adolescente, quien llegó a la escena del crimen en la urbanización por medio de su ubicación en el Sistema de Posicionamiento Global (GPS) de su hijo ya que no le respondió sus llamadas cuando se suponía que lo recogiera en el residencial Villa España.
Reacciona Justicia
Domingo Emanuelli Hernández, secretario del Departamento de Justicia, reaccionó mediante declaraciones escrita a la decisión de no causa contra los seis agentes.
“Las fiscales Melitza Osorio Santiago, Sonia Martínez Ortiz y Yolanda Morales Ramos presentaron evidencia científica que demostró la intención criminal y derrotó la teoría de que los agentes actuaron con legítima defensa cuando le hicieron sobre 60 disparos al adolescente, que se encontraba desarmado. Los agentes no se encontraban en peligro inminente”, expuso Emanuelli Hernández.
“No estamos de acuerdo con la determinación del tribunal por entender que no es compatible con la prueba presentada. Nos parece que la evaluación no estuvo basada en la scintilla de evidencia que requiere esta etapa de los procedimientos. El sistema de justicia tiene varios componentes y cada cual desempeña un rol. Nosotros cumplimos con el nuestro a cabalidad. La decisión le corresponde al juez”, indicó.
Por su parte, el comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa, declaró que “ningún policía sale con la intención de matar a alguien. Un policía es aquel que decidió dejar a su familia para salir a proteger la familia de otros. Cuando actúa, lo hace con el compromiso de honrar la justicia”.
“Como cuerpo dedicado a cumplir con la Ley, le dimos el espacio al Departamento de Justicia y a la Rama Judicial para que realizaran la labor que les compete. Dos jueces coincidieron en que no había causa para acusar a seis policías de tener la intención de matar a un joven”, añadió.