“Naranjito está de luto”. Asi se leen cientos de mensajes en las redes sociales luego de que se diera a conocer ayer en la tarde la muerte del reconocido chef de ese municipio, Jesús Morales.

Morales falleció a causa de las heridas que recibió luego de que se registrara una explosión con una estufa de gas, mientras preparaban comida para un servicio de catering en el barrio Anones del mencionado pueblo. En el incidente también resultaron heridos otros dos hombres de los cuales uno falleció.

El alcalde del conocido “Pueblo de los Changos”, Orlando Ortiz, lamentó el fallecimiento y solo tuvo palabras de elegios para quien fuera por mas de 30 años el dueño de “Mardel Catering Services”.

“Jesús era dueño de un servicio de catering y fue muy exitoso en ese campo. A Jesús lo llamaban desde prácticamente todos los pueblos de la isla por el buen servicio y porque era una persona sumamente responsable. Tuve la oportunidad de conocerlo y compartir con él y con su familia en muchas ocasiones. Son una familia de gran esfuerzo y dedicación”, dijo Ortiz en declaraciones a El Nuevo Día.

“Recuerdo su buena paella, que las preparaba al momento, pero también recuerdo que llegaba a las actividades con figuras en hielo, se las pedían y él hacía las mismas. También los ponches que hacía... él cocinaba de todo, pero con las paellas él llegaba al lugar y las preparaba allí mismo”, resaltó.

Asimismo, en los mensajes que inundaron las redes sociales resaltaban su alegría, su empatía y su compromiso con la gente.

Uno de sus hijos, Jesús Andres Morales, acudió a su cuenta de Facebook para agradecerle a su papá y destacar lo orgulloso que estaba de él.

“Gracias papi. Es inmensa la fortuna de amor, empatía y alegría que nos dejas. Orgulloso de tí siempre; tu legado es inmortal. Gracias, gracias, gracias”, manifestó.

Mientras su hija Vanessa Morales, al igual que su hermano, lo recordó en las redes sociales y lo describió como el mejor padre y lo feliz que era.

“Este dolor que siento hoy es el pequeñísimo precio a pagar por una vida extraordinaria a tu lado papi, me tocó uno de los mejores sin duda alguna. Viviste, amaste, trabajaste, gozaste, vivías orgulloso de nosotros y fuiste feliz y por eso hoy estoy en paz, no dejaste asuntos pendientes aquí en la tierra. Te lloraré por siempre y honraré tu memoria todos los días de mi vida. Hasta que nos volvamos a encontrar papi”, resaltó.

A Morales le sobreviven su esposa, dos hijos y un nieto.